Pasaron tres semanas desde que el ingeniero me dejó en el parque después de mi encuentro con el maestro y no había recibido llamada de él, pensé que eso había quedado ahí. Sin embargo ese sábado pasadas las 2 p.m me encontraba en el gimnasio terminando la rutina cuando mi celular sonó y era Tomás desde el celular del ingeniero, cosa que me sorprendió un poco, me cogió fuera de base. Sólo me dijo:

Don Julián (jajaja tan mk dizque don Julián) que Diego lo espera a las 3 pm para la revisión de su apartamento. Entendí que Diego era el nombre del ingeniero, yo ni le había preguntado el nombre.

 -Pero no me da tiempo estoy en el gimnasio y debo ducharme y llegar.

-No importa máximo 3:30 si quiere llegue así igual cada uno está sudado a su manera, no? 

Yo lo dude porque estaba completamente empapado de sudor y por la experiencia previa sabia que ellos estaban un poco más frescos, pero le dije Ok! Ya voy!

Cuando llegué casi a las 3:30 un guarda diferente al anterior me saludó y me dijo 

-Don Julián? 

-Sí señor! 

-Pase, lo están esperando, el ingeniero me dijo que usted ya conoce el camino.

-Ok, gracias, ya subo. Le dije mientras el le informaba a ellos por radio que ya iba para allá.

Subí y la puerta estaba ajustada, me sudaban las manos y el morbo, la arrechera y los nervios estaban apoderados de mí. Entré, cerré la puerta con seguro y escuché que el ingeniero me llamó desde la cocina. 

Cuando abrí la puerta estaba él completamente desnudo (que man más chimba, un cuerpo trabajado aunque parecía más genética que otra cosa, trigueño con unas nalgas firmes y unas piernas que uff) y Tomás haciendo lo que mejor sabía hacer, arrodillado dándole una tremenda mamada a Diego, estaba sin camisa, el pantalón a media nalga, yo quedé como pasmado de ver ese cuadro.

-Bueno se va a quedar ahí parado? O nos va a ayudar dijo Diego.

- Estoy súper sudado le dije. 

- Que importa, a este (señalando a Tomás) le gusta como esté, además aquí vamos a sudar más entonces no hay problema.

-Sonreí y me acerqué.

Diego me cogió por la cabeza y me besó profundamente mientras Tomás me cogió la verga por encima de la pantaloneta y se puso de pie. En un abrir y cerrar de ojos yo ya estaba desnudo con una mano en la verga, la otra en el culo y dos lenguas en mi boca, era mi primer beso de tres y esa situación me tenía demasiado caliente. 

Tomas dijo vamos a la habitación, yo no sé estos dos de dónde habían llevado unas colchonetas y era justo lo que se necesitaba. Cuando ingresamos Diego lanzó a Tomás sobre ellas y le dijo ahora si me vas a dar el culo que me has negado estos meses? o vamos a seguir en las mismas? Tomás solo asintió con la cabeza, yo me sentía como espectador de una pelea marital pero lo disfrutaba jajajaja. A decir verdad parecía que esto venía hace tiempo y el inge quería más de parte de Tomás. 

Diego dijo, hoy quiero comerme lo que he estado esperando y que el dueño del apartamento me coma refiriéndose a mí. Pues dijo las palabras mágicas, yo solo le seguí la cuerda e hicimos un delicioso triángulo dónde Diego le mamaba la verga y el culo a Tomás, Tomás a mí y yo a Diego. Yo tenía la cabeza caliente y quería ese culo de Diego para mí y con esa calentura hasta el mío se los aflojaba pero no, el ingeniero quería verga y eso le iba a dar. 

Diego puso a Tomás apoyado contra una pared, se puso un condón y sin dudarlo se lo metió de una, Tomás sólo se quejó dió un brinco y le dijo suave hp, yo me quedé viendo esa escena. Desde atrás por unos minutos venía cómo el culo del inge se contraía con cada empujón que le daba a Tomás, esa nalga se le ponía más firme de lo que ya era y yo ya estaba listo para hacer lo mío. 

-Que esperás para clavar a esta gonorrea, que me destruya el culo o qué? Me grito Tomás con el otro vuelto un animal clavándolo. 

- Eso no era lo que quería malparido? Le respondió Diego.

- Sus palabras son órdenes maestro, le dije yo, mientras me ponía el condón.

Entré despacio, ese man estaba calientísimo, se sentía muy rico, su espalda sudaba y para poder acomodarse bien sin sacarle la verga a Tomás lo cogió de la cintura y se echó para atrás metiéndose y acomodándose en mi verga. Pero parece que a los dos les entra como si nada! les dije. Diego solo se rió y dijo a mi un man bueno me afloja lo que sea y a este, refiriéndose a Tomás, me tocó caminarle todos los días hasta que hoy se decidió a dármelo, hueso duro de roer pero al fin cayó, y de qué manera!

Nos giramos quedé contra la pared y el inge se movía solito de una manera deliciosa, no tuvimos que hacer nada más porque ese hp tenía una máquina en la cintura, unos minutos más y estábamos a punto de estallar.

Diego le susurró algo al oido a Tomás, yo no entendí, cuando menos pensé lo sacaron de golpe y me cogieron y me empujaron a la colchoneta yo pensé estos me van es a violar y de la arrechera que tenía no me importaba, pero no, lo único que querían era bañarme en leche, Diego se me subió sobre las piernas y Tomás estaba atrás de mi cabeza con mi boca casi en sus webas en menos de nada Diego se vino a chorros y me lleno de leche las webas y el abdomen mientras Tomás se vino en mi pecho, yo de ver esos y sentir como dos machos con sus cuerpos sudados se me venían encima y esas caras de placer me vine un montón. Nos recostamos en la colchoneta un rato.

Diego me dijo el maestro trajo agua en baldes porque aún no hay conexión, te puedes bañar sin problema, así fue. Nos arreglamos, nos refrescamos y salimos. 

Nunca pasó nada pero al día de hoy ese recuerdo me hace poner erecto y aún me masturbo recordando lo magnífico que la pasé con ellos dos.

Saludos a los lectores.