Guía Cereza
Publicado hace 1 semana Categoría: Gay 1K Vistas
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Luego de la culiada que me metió el negro Mena, me quedé dormido, como aquel bebé que le dan su teterito bien cargado de deliciosa y fina leche, sin enterarme de cuando el se fue y sin percatarme, producto de la prenda que tenía, que aún estaba desnudo y olvidando que allí quedaba Yoiser el primo. Cómo lo dije en el relato anterior, Yoiser tiene 1 5 años, juega fútbol, mide aproximadamente 165 Cms, cero grasa corporal. Ha sido goleador y ha hecho parte de la selecciones U13 y ahora la U15. Ahora tiene su cabello con chusquitos o crespitos, es de aquellos que cuando juega se recoge las mangas de la pantaloneta, lo que hace que le quede más corta y le resalten sus piernotas y, además, es mera plaga.

Eran casi las 12:00 del día, yo acostumbro a dormir boca abajo, con un pie flexionado y el otro extendido, cuando siento que alguien me llama y me sacude de la nalga.

Yoiser: eyy caballo, pana.

Me desperté y me percaté que todavía estaba encuerado, con un guayabo el hijueputa,con una gran erección y lo peor, con un dolor y ardor de culo el triple hijueputa, sentía que no me iba a poder sentar. Le respondí sin girarme, por pena; uno, a que me viera parolo y dos, por lo que el había visto la culiada que me metió su primo.

Yo: quiubo parce.

Yoiser: mostro es que ahora viene mi hermana y además yo debo organizarme y salir para volver cuando ella esté acá y crea que yo vengo de estudiar.

Yo: ahhh sisas dale. Ya salgo.

El salió de la habitación y ahí si me gire. Yo tenía un calor el hijueputa, estaba todo sudado y ahí me di cuenta de que la casa tenía techo en tejas de eternit (asbesto) y eso calienta como un putas.

El regresó y traía mi ropa. Ahí lo ví pleno, estaba sin camisa, con el mismo boxer de rayas. El hijueputa tenía la verga parada y me abrió el apetito.

P: mostro, vea la ropa y su celular no ha parado de sonar.

Miré y ví un poco de llamadas y mensajes de mis papás y mi hermana. Les escribí diciéndoles que estaba bien y que ya iba para la casa.

Yo: ahh gracias parce.

P: jajaja mera farra la de ustedes anoche, eso fue con toda.

Yo: uyyy si parce. La verdad no sé que me pasó, porque hice eso. A mí me gustan mucho las mujeres

P: relajese parce, no tiene que dar explicaciones, con tal de que uno pase chimba que importa lo demás. Ahí el de buenas fue el primo.

Yo: cómo así, por qué dices eso?

P: UMM con respeto, pero que chimba de culo se comió jajaja. Y paque, pero también mera verga se manda usted. Las pollas deben gozar de lo lindo jajaja

Yo: uyyy pana no digas eso que me achanto. Eso no vuelve a pasar.

P: ah pero es verdad. Y si vuelve a pasar, eso a nadie le importa. Relajado es su cuerpo.

Yo: pues si también es cierto. Papi me vas a dejar yo me pegó un duchazo antes de irme, es que que calor tan hijueputa

P: sii claro dale. Yo también me tengo que bañar enseguida.

Me puse el boxer y salí para el baño. Allí descubrí otro detalle de la casa del que en la noche con la borrachera no me había percatado, el baño no tiene puerta, al igual que la ducha. Para entrar al baño era una cortina negra y en la ducha una cortina plástica traslúcida. Igual, no le presté atención a eso. Me senté en el sanitario, trate de hacer del dos, pero el ardor en el culo era el HP y solo hice un poco jajaja. Pensé "uyyy hijueputa, si este es el precio de dar culo, no lo vuelvo a hacer" " uyyyy Mena malparido, mi culo no lo volves a probar nunca, negro gonorrea"

Me metí a la ducha. Por fortuna, no era regadera sino un chorrote de agua helada. Me puse de espaldas al chorro, apoyé mi frente contra la pared, abrí mis nalgas con ambas manos y dejé que el chorro cayera en mi ano, sintiendo un alivio el hijueputa. Llevaba así un buen rato, cuando sin avisar, entró el primo, con una toalla.

P: mostro vea sequese con esta toalla. Uyy pana espera yo orino.

Y se bajó el boxer dejándolo a medía nalga y sacó su verga que estaba entre morcillona y ya parada. Era un lindo espectáculo el que me ofreció, ese culito parado y esa verga venosa. El ardor de mi culo, casi que desapareció. Cerré la ducha y empecé a enjabonarme, poniéndome frente a el.

Yo: ahh parce gracias. Uff que chimba de chorro huevón.

P: acá todos los chorros son chimbas y grandes jajaja.

Yo: jejeje, si eso veo.

Dije eso dirigiendo mi mirada a su, ya erecta verga, la cual seguía sin expulsar un solo chorro de orina, pese a que se supone que eso era lo que iba a hacer, mientras bajaba y subía lentamente su prepucio y me miraba con deseo.

Yo: es que es mejor así con buen tubo que la regadera.

P: ahh si, y acá también hay buenos tubos jajaja

El morbo del doble sentido en la conversación, de verlo así y de sentirme observado por el, además de estarme acariciando mientras me enjabonaba, me fue produciendo una erección inocultable. De manera intencionada, llevé mis manos a mis nalgas, me incliné un poco y me enjabonaba el culo. Y allí soltó la propuesta que yo esperaba.

P: si quiere le ayudo a enjabonarse la espalda jejeje.

Yo: ahhh si quiere, ayúdeme.

P: hágale pues

Se subió el boxer, corrió la cortina y entro a la ducha.

P: préstame el jabón.

Se lo pasé y le di la espalda, quedando yo de frente a la pluma de la canilla.

Me aplicó el jabón en la espalda con su mano izquierda mientras con la derecha iba estregándome, bajando lentamente desde el cuello. Para ese momento, yo ya tenía mis 21 Cms de picha a pleno fuego. Llegó hasta mis nalgas, dónde se enfocó. Luego, dejó el jabón en la jabonera y con ambas manos empezó a masajear de nuevo mi espalda y mis nalgas, bajando por mis piernas y:

P: espera para no mojar los bóxer.

Y se los quitó, quedando también desnudo.

P: venga lo enjuago

Paso su mano para alcanzar la pluma de la ducha, y pude sentir su verga en mi culo. Abrió el chorro y empezó a enjuagarme con sus manos. Desde atrás y pegado a mi, me estrego el pecho, el abdomen, los muslos y oohh sorpresa, me cogió la verga, (cosa que en la noche no me hizo Mena, quien antes tapó mi picha con las tangas de la prima, y empezó a pajearme suavemente. Me lavó también las huevas, mientras me metía la lengua en la oreja.

P: que chimba de verga y de culo tiene usted parce

Yo: ufff igual que usted. No me lo he sacado de la cabeza desde que lo ví mirando.

El agua seguía cayendo sobre nosotros.

Me giró y quedamos de frente. Me abrazó sujetando fuertemente mis nalgas y metió su verga entre mis piernas. Y, nos dimos un fuerte y rico beso, con lengua, siendo la primera vez que besaba a otro hombre y, otra gran diferencia con su primo, que no me dió ni un besito, jajaja. Le mermo el volumen del chorro de agua.Llevó luego sus manos a mis hombros, me dirigió a sus tetillas, se las empecé a chupar, pero el me dijo:

P: uff muérdelas.

Yo sé las comencé a morder y con mi mano le agarraba su verga.

P: muérdelas más duro papi, duro

Mordi más fuerte sus tetillas, mientras el gemía de placer. El seguía tocando mis nalgas, las abrió y sentí como me sobaba el ano con un dedo. Luego continué bajando en busca de su verga, hasta encontrar esos aproximadamente 20 Cms de una verga negra, gruesa y venosa, con una leve curvatura hacia la derecha. Me la metí a mi boca. Mi segunda verga en menos de 8 horas jajaja. El gimió profundamente. Me cogió de la cabeza y me comenzó a follar la boca.

P: ufff rico. Mételo todo siiiiii

Yo traté de hacerle garganta profunda, pero la verdad no pude. Creo que faltó el frasquito aquel jajaja. Levantó su pierna izquierda y metió sus huevos en mi boca, las chupé, saboreé y disfruté. Con mis manos lo giré, quedándome de frente esas grandes, duras y paraditas nalgas. Las abrí y allí estaba escondido ese hermoso anillo. El se inclinó hacia adelante, colocando sus manos y cabeza contra la pared. Llevé mi lengua y me dedique a chupar ese estrecho y apretado culo. El solo gemía.

P: ufff que chimba de lengua, uffff muerdemelo.

Le obedecí y le mordía el ano. En mi mente, empecé a desear más ese culote. Me levanté lentamente y fui pasando mi lengua por su espalda. Al reincorporarme totalmente, mi verga quedó en su raja, yo soy un poco más alto que el, abrí sus nalgas, al tiempo que ponía la punta de mi verga en su orto. No dijo ni hizo nada, permaneció como estaba. Ensalibe mi verga y su culote. Abrí más sus nalgas y comencé a introducir mi chimbo.uffff ese culo se sentía apretado. Ninguna cuca de polla la habia sentido tan cerrada nunca. El se quejaba pero también gemía de placer. Empezó a mover su culo en varias direcciones. Yo lo sujeté de la cintura, mientras el, con sus manos abrió bien sus nalgas. Seguí taladrando hasta que sentí que lo tenía todo adentro y allí empecé a aumentar mis movimientos pélvicos. Humedeci bien mi mano, le cogí el chimbo y le masajeaba su glande y huevas.

P: ufff que rico, que chimba eso.

Cada vez le daba más duro. El movía a un ritmo acompazado esas nalgotas. No parecía que fuera la primera vez. Mi excitación subía. Era el primer culo que me comía y no era de una hembra sino de un macho. Lo abracé y besaba sus espalda.

P: ufff si dame duro, uyyy que chimba parce.

Yo: te gusta.

P: siii.

Yo: te gusta mucho la verga?

P: siiii mucho. Dame mas

Yo: qué más te gusta

P: el culo, la chimba, culiar parejo.

Me hizo retroceder dos pasos para atrás y se inclinó, apoyando sus manos en el piso y dejando su culo al aire a toda mi disposición. Yo lo cogí de la cintura y empecé a follarlo con todo, a darle verga corrida hasta que no aguanté más

Yo: uffff me vengo parce.

P: siii dale venite adentro.

Y si, eso hice, cuatro trallazos de leche sentí que salieron de mi verga, llenando ese tierno y juvenil culo con mi leche. Me sentí triunfante, pleno. Se levantó y me dijo.

P: chúpamela

Yo ya no quería más, me sentía cansado, pero no era justo con el dejarlo así. Entonces, me arrodillé y comencé a chupar ese rico Chimbo. Estuvimos un rato cuando el lo sacó de mi boca y empezó a hacerce la paja con su mano derecha y con la izquierda sujetaba mi cabeza. Se le brotaban esa venas, el cuerpo tensado. Yo, como un ternero, con la boca abierta esperando mi lechita, hasta que el empezó a correrse, de una forma que yo nunca había visto a nadie, era como una canilla abierta. Parte se quedó en mi cara pero el resto en mi boca, la tragué toda, que delicia.

P: ufff que chimba de culiada jejeje.

Yo: siii papi rico.

Le di otro rico beso me salí de la ducha y el se quedó para bañarse.

Me vesti y cuando el salió del baño, desnudo y con la toalla en los hombros, nos despedimos.

Yo: pana suerte, que esté bien.

P: mostro déjeme su número de WhatsApp, por si algo. Ya sabes que por acá a la orden jajaja

Se lo di y le dije.

Yo: papi está bien pero cayetano con Mena, que no sepa nada de esto.

P: uyyy claro, oiga. Relajado.

Me dió otro beso, me agarró

la picha, yo su nalga y me fui para mi casa. El dolor de culo quedó olvidado.

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