Desde muy joven inicio el gusto por el morbo con otros hombres, aquel día en que jugaba en la calle y aquel hombre mayor sentado en su sala sacaba su miembro, mientras yo veía con curiosidad y vergüenza lo que hacía.

Me asusté, salí corriendo hacia otro lugar a jugar y tratar de no pensar en lo que había visto.

Esa noche no podía dejar de pensar en aquella imagen, el con su mano en su miembro y su mirada fija en mi, lo excitaba, pensaba o me estaba imaginando cosas. de pronto estaba excitado con otra cosa y yo mal entendiendo.

Fue una semana de pensamientos indebidos con un hombre, que me pasa yo soy hombre me gustan las mujeres, con mis primas nos habíamos divertido mucho, de tanto pensar y salir de la intriga nuevamente fui a jugar cerca a su casa hasta lentamente acercarme a su ventana.

El salió vio que yo estaba jugando miro para todos lados y nuevamente ingreso.

Ya sabía yo que estaba equivocado, que película me arme, hasta que lo vi nuevamente, esta vez estaba desnudo, me he quedado frío. Ese señor realmente me hizo tener una erección, el empezó acercarse un poco a la ventana y empezó a masturbarse tratando de que solo yo viera, eso me puso a mil el corazón, yo veía como aquel señor se daba placer mientras yo lo veía, yo seguía disimulando que jugaba, hasta que se corrió, vaya me quedé fijamente mirándolo como lo hacía, el término se fue de donde estaba, yo salí corriendo dudando si realmente eso me ha gustado, pero mi amigo allá abajo me lo confirmaba he llegado directo al baño a masturbarme, no podía creerlo aquel señor me hacía pensar en cosas muy prohibidas pero muy placenteras.

Me he corrido de una manera exagerada me ha salido mucha.

Aquel día descubrí el deseo que tenía por ese hombre mayor que después de haría realidad.