Mi hermana tuvo una amiga que tiene vagina peluda. Han sido mi delirio desde siempre. A mi hermana la ví sin querer una mañana siendo muy pequeño y hace poco tiempo tuve encuentros con una chica de más de 20 años. Ambas con unos pelos que emanaban olor, sabor y mucha vista para quienes gozamos con vaginas llenas de pelos. A mí hermana sin querer una mañana la ví totalmente desnuda de perfil sin querer. Ella estaba frente a un espejo cuando había salido de bañarse. Se preparaba para irse a la escuela. Lo primero que llamó mi atención fue ver de perfil cómo se asomaba una gran cantidad de pelos de su vagina y también el perfil de sus nalgotas que eran tremendas. Inmediatamente mi pequeño pene se puso firme como un lápiz y mis ojos casi se salieron de sus órbitas. No se dió cuenta y siguió como si nada. Tiempo después también sin querer descubrí fajas y ligueros que sinceramente nunca vi que se los pusiera o usara. Bueno, no todo quedó ahí ya que a partir del siguiente día seguí espiándola y me encantaba hacerme pequeños jalones en mi miembro hasta que, una mañana entró por otro lado a mi cuarto. Su cuarto y el mío estaban separados por una cortina por donde la espiaba pero ambos tenían puertas aparte y por eso se salió del suyo y entró por la otra puerta. Sa había puesto una bata y yo sorprendido me acosté rápido y me hice el dormido. Ella se acercó y me dijo en voz baja, qué estás haciendo? Yo me hacía el dormido. Entonces ella levantó mi cobija y metió su mano y al tocar mi verguita parada, me preguntó, por qué está así? Yo comencé a sentir risa y excitación y dizque bostesé y le dije, no sé. Ella siguió acariciándome  y cuando abrí los ojos ella me sonrió y se levantó para que la viera cuando se abrió completamente la bata. Quedé mudo y seguro con la boca abierta al ver muy cerca su vagina y sus hermosos y excitantes vellos negros tan divinos. También vi sus pechos medianos y todavía me permitió ver sus enormes y suculentas nalgas porque se dió vuelta y se levantó la bata. Fueron unos segundos pero a mí me marcaron toda la vida ya que desde entonces amo las vaginas con pelos y los traseros enormes aunque he de confesar  que a ninguna mujer le he dicho no aunque esté rasurada o no tenga grandes nalgas. Mi hermana tenía las hormonas al tope. Al día siguiente hasta posaba porque sabía que la estaba observando y una mañana de plano no se aguantó porque entró a mi cuarto también en bata y se agachó y me dió jaloncitos pero ya con su respectiva chupada. Se dió un banquete que hasta me dejó un poco adolorido, nunca he olvidado esa mamada y las otras que me dió. Rica boca y suculento cuerpo que tenía mi adorada hermana. Después por cambios que hicieron debido a las modificaciones que hicieron nos pusieron en otros cuartos y jamás volvimos a tener ningún tipo de contacto de no ser el normal. A mí hermana le debo amar los pelos en los culos y las vaginas así como los culos de todo tipo sin dejar a un lado a las rasuradas.

Un día estando con una joven amiga que es lesbiana, pero con un poquito de bisexual en la plática salió que estaría bien el que tuviéramos sexo ya que en mi espacio del trabajo ya nos habíamos calentando mucho durante varios días. La masturbaba un poco y me mostraba sus enormes pechos blancos y muy hermosos. Ese mismo día, nos salimos y nos fuimos a un hotel. Nos besamos y con toda la tranquilidad del mundo la fuí desvistiendo. Traía un conjunto rojo de brasier y cachetero. Sinceramente no tiene casi nalgas, pero eso no me importó ni me importa en cualquier mujer. ¡Estábamos a media luz y después de estar dándonos de besos y caricias le bajé su cachetero y ho sorpresa! ¡¡Tenía y tiene una verdadera mata de pelos!!. Me quedé mudo y en otra dimensión. Ella como que quiso decirme algo y yo le pedí que no mencionara nada porque quería admirarlos, tocarlos, olerlos, besarlos, chuparlos y restregarlos en mi cara y con mis manos y boca. Sólo dijo deberás? Sí le contesté. Creo que eso la excitó porque cuando comencé a acariciar todos sus vellos ya estaba muy mojada. Me dijo, por favor deja lavarme porque oriné hace ratito y le dije no me importa así te quiero chupar, seguro? Sí..la acabé de desvestir con muchísima delicadeza y le pedí que se sentara en la orilla de la cama pero sobre las sábanas y que por favor abriera bien las piernas y que luego se acostara dejando sus gruesas y delicadas piernas colgando. Procedí a masturbarla delicadamente hasta que de plano metí mi cara para hacerle su primer oral de un hombre porque ya varias chicas se lo habían hecho. Estuve oliendo, besando, lenguetando, jalando con mis labios y succionando todo lo que ahí hubo para mí placer que siempre ha ido acompañado de brindar placer a todas las mujeres con las que he estado. Estaba muy excitada y saque y saque nectar de diosa y yo lamiendo besando y bebiendo de esa fuente de lujuria.