Placer lingüístico... I
Su post en guía era algo más o menos así: "busco un hombre que me de oral y ya" sin muchos detalles o explicaciones adicionales, que yo realmente no necesitaba. Le dejé un mensaje con una descripción de mi, de lo interesante que se me hizo su idea y de mi gusto por hacer oral y en general por complacer a la mujer...
Después de un tiempo establecimos contacto y para mi desdicha ya había encontrado lo que buscaba así que por ahí se quedó todo de momento, tiempo después comenzamos a tener ciertas interacciones por alguna red y para no alargarme en detalles diré que pasados un par de años al fin hubo la oportunidad de conocernos y ver si había feeling: La cita fue en un lugar público, con mucha gente cerca, pero que ella conocía bastante bien como para encontrar un lugar con la suficiente privacidad para hablar de gustos, experiencias y anécdotas sexuales sin sentir miradas que nos juzgaran. En determinado momento, sacó uno de sus senos dejándome ver ese pezoncito hermoso de color oscuro, y apuntando amenazante y haciéndome entrar en piloto automático, sentí un saltote en mi entrepierna y pasados unos segundos percibí mi boxer húmedo, la boca abierta y hecha agua. Y volví a escuchar las cosas que me decía mientras con esa sonrisa pícara se lo guardaba de nuevo.
El tiempo se pasó rapidísimo y al salir de ese lugar me fui con muchas expectativas, fantasías y absurdamente excitado por la situación, ambos comprometidos, ambos escapados de nuestras responsabilidades...
Pasaron unos meses y seguíamos en contacto por redes hasta que se presentó la oportunidad, coincidimos sin presiones, sin afanes, sin forzar nada.
Hicimos una cita para "desayunar" (esa fue mi excusa para escapar de mi trabajo) Llegué al lugar acordado con muchos nervios y unos minutos después llegó ella, el trato era claro iba a darle un oral y .
Así sin más, darle placer con mi lengua tal como lo pidió en su post años atrás y como tantas veces lo desee mientras me masturbaba viendo las cosas que publicaba o me enviaba ocasionalmente...
Llegó con una falda colorida, larga y amplia que no dejaba ver mucho su figura que tanto me gusta pero demasiado práctica para lo acordado, nos saludamos, charlamos un par de minutos y se subió la falda invitándome a entrar debajo comencé a oler lentamente su entrepierna sobre la tanga y luego procedí con besos cortos, que fueron aumentando su duración e intensidad alternándose con lenguazos hasta que quiso ponerme más cómoda; se acostó boca arriba en la cama, subió su falda y corrió a un ladito la tanga. No hicieron falta palabras...
(Ahí estaba, por fin
Observando su sonrisa pícara y su cara de morbosa a través del bosque que se formó en su entrepierna tras días sin depilarse y que había recortado cuidadosamente para la ocasión.
Todo hacia que la situación fuese un poema... Los compromisos de ambos, el estar escapados, las mentiras y las carreras para llegar...
Pero sobre todo el saber que después de tantas veces en las que cerré los ojos imaginando sus aromas y sabores a solas en la ducha, las que sentí probarla en otros labios al fin la tenía dispuesta para mi. )
"Acuéstate" fue la orden que me regresó del trance en que estaba y que inmediatamente obedecí. Se puse en 4, con mi cara entre sus piernas, las piernas al lado de mi cuerpo y observándome hacia abajo como disfrutaba mamandosela después de unos minutos sentí como comenzaba a tocarme suavecito alternando caricias con sus manos y pies, luego de manera más intensa y morbosa, con más deseo, se giró para quedar en 69 y yo seguí dándole placer con mi lengua y disfrutando de sus aromas y sabores exquisitos hasta que me parecio que estaba teniendo un orgasmo sobre mi cara
No se si es porque lo hice bien, si quiso premiarme, si fue algo premeditado o el momento le inspiro hacerlo, lo cierto es que al final me premio con una deliciosa mamada, precedida de muchas caricias a mi miembro con sus manos y sus pies.
Y la guinda del pastel fue probar mi semen que aunque me gusta, nunca lo sentí tan sabroso como cuando pude lamerlo directamente de su hermoso rostro y sus senos obedeciendo su orden firme y decidida "limpiame"
Paradojicamente, no hubo un solo beso en su boca, pero sus labios están tatuados en la mía.