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Su vagina estaba completamente húmeda, así lo demostraba el grueso consolador que la muy puta se estaba introduciendo; era evidente que ella era de aquellas insaciables, capaz de desechar una legión de vergas si que el temblor de sus piernas y su vientre orgasmo tras orgasmo la detuvieran ...por eso yo disfrutaba viéndola meterse esos monstruosos artículos que llamaba "juguetes" y que eran todo, excepto inofensivos.
En su actuación no paraba de preguntar si me gustaba lo que veía, como si el rigor de mi verga abusada por los pajazos que solo un depravado con suficiente contenido pornográfico le puede proporcionar a su miembro viril no fueran suficiente recompensa para su ego de deseada perra.
Rojo y brillante tenía ya mi glande, si me detenía me ardía, por eso no paraba de jalarme el ganso mientras aquella hembra insaciable desarrollaba el show que mi dinero había pagado. "Si, me gusta verte, me gusta verte la cuca en esa posición" repondí; mientras enfocaba mi boca y le daba lengua al aire a una chica invisible para que ella viera como movía mi lengua ... Yo ya estaba perdido, no razonaba, solo quería sentir que la muy puta por fin se venía, por fin se saciaba, y que por fin en largo y profundo grito su final fuera evidente; pero nada más lejos de suceder.
Ella continuaba, solo apretaba las piernas con fuerza y las estiraba un poco para contonearse por unos segundos, conteniendo el grito y continuando para el que yo sabía era otro orgasmo que confirmaba pero no sabía a su adicción al sexo. .oO(Malparida) pensaba yo mientras apretaba el culo para no venirme, pues era consciente de que una vez desechado mi churro me iba a aburrir de verla allí despatarrada y vulgar.
La envidiaba ...por esa capacidad de correrse una y otra vez sin que el cansancio la detuviera, capaz de mantenerme pegado a esa pantalla todo el tiempo que ella quisiera o hasta que mis huevos aguantaran ...pero también la deseaba. Cuando no estaba frente a su show o agotaba mis tokens mensuales imagina si sería capaz de hacerla mi mujer y tener que soportar que se siguiera masturbando para otros hombres, solo porque obviamente yo solo no podría con semejante caudal de deseo enfermizo que por sus muslos intensos chorreaba.
Sabía que no podía apostar en contra de ella, ese además de su vicio, era su oficio; yo por otro lado debía continuar con mi vida ganándomela de maneras menos placenteras, así que relaje un poco mis nalgas y me la casque rapidamente ... aguantando eso sí un poco para que me saliera con bastante presión (me gusta cuando el chorro logra llegar hasta mi pecho) ... Continúe Jalandomela y cuando ya sentí suficiente presión en mis huevos me deje recostar un poco en la silla y lo deje salir todo ... El chorro de mi verga voló sobre mi abdomen para caer espeso sobre mi pecho a la altura del esternón ... riquísima esa primera contracción de mi perineo ... la contuve un poco antes de dejar que mi verga se contrajera una y otra vez evacuando mi esperma en largas contracciones de placer palpitante ... todo mi torso y abdomen cubierto de mi líquida masculinidad
Termino aquí este relato ...porque la postguerra no me es grata