Guía Cereza
Publicado hace 21 horas Categoría: Voyerismo 162 Vistas
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Nos fuimos a nuestra Suites y nos recostamos un rato cada una en su habitación para recobrar algo de energía y así poder aguantar ir al bar con Jerson y su presunto amigo que espero no sea muy feo ni muy intenso, la verdad el viaje en velero me había dejado muy cansada pero no podía decirle a mi hermana que no tenía ganas de ir a rumbear, no podía dañarle el plan a ella sabiendo que nunca se anima a salir o hacer algo y ahora dármelas de aburrida,  así que acordamos descansar una hora teniendo presente que eran las 6:30 y nos habíamos quedado de ver de 9:30 a 10  en la entrada de la discoteca del hotel, Alejandra me comentó que Jerson le dijo que en la discoteca había fiesta temática de antifaces y los daba la misma discoteca lo que hacia emocionante el plan.

 

 

 Me dormí como casi dos horas  y cuando desperté mi hermana estaba en el baño no se cuanto llevaba duchándose así que me dispuse a alistar mi ropa, saque un vestido color crema estampado de flores silvestres rosadas vaporoso, de falda a medio muslo y con tiras de amarrar al cuello cubriendo mis senos, este diseño dejaba un escote ligero hasta mi ombligo y la espalda descubierta, unas sandalias enlazadas a mi pantorrilla, escogí un conjunto intimo color gris traslucido a juego para que no resaltara sobre mi vestido, mi hermana salía del baño y yo aproveche para ingresar solo con mi ropa intima.

 

 

La verdad la ducha me refresco bastante y retoque mi depilación perfumando con dedicación por unos veinte minutos aproximados o algo más, y al salir cruce a mi habitación comenzando a aplicarme crema brillante por todo mi cuerpo y a arreglarme,  no me demore mucho por ser un vestido sencillo pero muy sensual y perfecto para el clima y la brisa o el calor en la discoteca por la gente y se me veía genial en mi color de piel, pinté mis labios color palo de rosa e iluminador y algo de sombras a juego con mis labios; Salí de mi habitación e ingresé a la de mi hermana viéndola en un vestido azul oscuro muy similar al mío en cuanto ala forma vaporoso y de tiras cubriendo las senos y la espalda destapada,  le daba media palma arriba de sus rodillas no ajustado mas bien suelto y sin mangas con la espalda descubierta, la vi muy maquillada con labios rojo carmesí, no vi que conjunto llevaba debajo ni las tiras se le veían en la espalda, pero de verdad si estaba muy divina, al final  fuimos a comer algo al quiosco del hotel ya que la hora de cena se nos había pasado, yo me pedí un ceviche de camarones y mi hermana un ceviche peruano con un par de cervezas regresamos a cepillarnos los dientes y enjuague bucal y marchamos algo ansiosas para la discoteca pues ya eran más de las 10 y debían estarnos esperando.

 

 

En la entrada estaba Jerson solo y pensé que me había arreglado para nada, eso me bajo el animo de inmediato e inclusive llegue a pensar en decirle a Alejandra que entrara ella con Jerson y yo me devolvía mejor a la suite para no ser mal tercio, pero como si me leyera la mente mi hermana inmediatamente me comentó, “- si el otro chico no viene entramos y vemos como esta el ambiente, ¡de seguro con lo linda que te ves haces levante rápido!-“, la mire con resignación, pues entendí que para ella era importante que yo la acompañara así fuera un rato y ver si pasaba algo entre ellos o solo era un niñito queriendo aprovecharse de un par de señoras solas en sus vacaciones; Al acercarnos a Jerson lo primero que hizo fue disculparse porque su amigo aun no había llegado pero que en máximo veinte minutos llegaba, mire a Alejandra y le dije “¿en media hora te dejo con tu amigo, vale?”, y ella con algo de pena me asintió con la cabeza.

 

 

Al entrar nos recibieron con saludo unos cocteles y nos dieron a escoger de una mesa unas mascaras muy decoradas de ajustar con caucho que solo cubrían de la nariz para arriba dejando descubierta la boca y la barbilla, yo aproveche y escogí una del mismo color de mi vestido crema con flores, y Alejandra una roja de plumas azules que resaltaba su vestido azul aprovechamos y nos fuimos un momento al baño para retocarnos y nos tome un par de fotos de como nos veíamos para por si Luis me pedía que le enviara, primero juntas y luego cada una por separado para luego alcanzar a Jerson en una mesa aun rincón de la discoteca un poco separada de la pista de baile y del tumulto de gente, así podríamos hablar y ver todo lo que pasaba en la pista con muy buen ángulo a pesar de la luz, Jerson se veía bien con su mascara blanca y con su color de piel chocolate, no tenía un acento muy marcado cosa que me sorprendió, él estaba con unas bermudas azules y tenis Lacoste blancos y una camisa guayabera blanca manga corta lo que lo hacia ver muy bien;  Adentro estaba muy lleno de personas, la mayoría parejas algunas mujeres con vestidos de dos piezas, minifaldas y corpiño nada más, y otras con vestidos similares a los nuestros por el calor era lo más adecuado para no estar sufriendo con el, lo que si vi es que muchas mujeres no llevaban brasier algunas solo estaban con una falda o mini falda o un velo y la mascara y los tipos la mayoría estaban de bermudas y camiseta o guayabera nada a llamar la atención.

 

 

El ambiente era muy bueno la verdad me estaba arrepintiendo de querer irme rápido, inclusive un par de extranjeros me había sacado a bailar y ya en la pista se notaba un ambiente muy liberal, algunas parejas bailaban manoseándose y otros claramente le metían mano a sus parejas con descaro, algunas mujeres como les decía llevaban sus senos al aire y las mascaras daban perfectamente el aire de complicidad, Alejandra bailaba muy a gusto con Jerson y los veía reír bastante cosa que me alegraba por ella, el gringo que me saco a bailar parecía un pulpo intentando mover sus manos por mi cuerpo lo que me incomodaba y me hizo aburrir y dejarlo allí en la pista solo mientras me regrese a la mesa, me tome uno de los cocteles que nos habían traído, como todo era organizado por el Hotel en cada mesa habían dejado una bandeja con hielo media botella de aguardiente amarillo condones y lubricantes y unas botellas de agua, seguí mirando a mi hermana y el espectáculo de la pista que ya se parecía más a un estriptis colectivo que cualquier otra cosa más por el descaro con que las parejas se manoseaban y algunos con complicidad del momento se masturbaban mutuamente mientras bailaban.

 

 

 

MI hermana ya estaba en sintonía con el lugar y podía ver como entre giros, roces y vueltas era tocada por Jerson mas de la cuenta y ella solo se reía y mordía su labio con picardía a veces con lo que le susurraba al oído que ni idea que sería, en ese momento un chico negro se acerco a Jerson en la pista y lo saludo muy efusivamente, era un mulato bastante corpulento y alto bien vestido con bermudas verdes y guayabera blanca tenis blancos Lacoste muy similar a Jerson, solo que más alto y más fornido, Jerson cogió de la mano a mi hermana y se vinieron ellos hacia la mesa lo que me hizo poner muy nerviosa al pensar que éste sería el chico que supuestamente debía ser mi pareja y no había llegado a tiempo; La verdad me dieron nervios cuando vi que se acercaban a la mesa había llegado a pensar que o no llegaría o no sería tan atractivo como el que venía con ellos hacia mi, Jerson se acercó a mi oído y me lo presentó como un primo al cual le extendí mi mano para saludarlo y me retire el antifaz cosa que me viera bien a la cara, pero éste se me acerco dándome un beso en la mejilla presentándose como Tomas, se sentaron ellos para brindar porque ahora si estábamos completos, Tomas a mi lado, Jerson y Alejandra juntos muy acaramelados casi que abrazados y jugueteando con las manos entre ellos, se veía como él ponía su mano en la pierna de mi hermana y ella ponía la suya encima para luego retirársela con discreción, pero luego él tomaba la de ella y se  la colocaba en su muslo y ella se quedaba nerviosa cuando hacia eso, era un juego que verlos hacerlo me daba morbo lo confieso porque mi hermana mientras lo hacia se notaba que se excitaba.

 

 

Brindamos y nos alcanzamos a tomar un par de copas o chupitos del aguardiente y yo le hice tomar a Tomas dos copas más por haber llegado tarde y dejarme sola casi media hora, pero Jerson reviró por su primo diciendo “-primo pero la señorita no se había aburrido porque como esta muy linda, varios la sacaron a bailar muy efusivos intentando conquistarla!-”, pero yo le refute diciéndole “-¡si pero precisamente por estar sola a ese último lo tuve que dejar solo en la pista, porque parecía un pulpo y me había molestado!-“,Tomas también reviro por el mismo diciendo “Me parece bien que lo hubieras dejado en la pista, porque tu estas prometida esta noche a solo bailar conmigo o con quien yo autorice”, Alejandra y yo nos reímos de su forma de decirlo todo sobrado y seguro de sí y le replique “-¡ te creíste de buenas!, y ¿quien hizo semejante ofrecimiento porque a mi no me consultaron?!”, y Tomas nuevamente muy sobrado contestó, “-¡eso no importa, yo me encargare de que hoy tu pases una noche inolvidable y solo quieras estar conmigo o con nosotros, no necesitas a los de las otras mesas para divertirte hoy, con solo nosotros será más que suficiente y sobrara!-“, Alejandra también reviro por su comentario dejando claro, “¡podría ser cierto lo de que aquí esta todo lo que necesitamos, ya veremos!, ¡pero Jerson es solo mío hoy así que no ofrezcas lo que no te pertenece!”, yo lo mire desafiante ante su sobrades esta vez quitándome mi mascara para decirle “¡eso quiero verlo, porque niño yo soy mucho mayor que usted y seguramente tengo más que ofrecer yo o ¿acaso no me ves? y además estoy casada!” el guardo silencio mientras Jerson y mi hermana se reían y Jerson le preguntaba a ella si también estaba casada a lo que Alejandra lo negó con la cabeza y entendí que le dijo que hacía más de 10 años se había separado, eso le sacó una sonrisa de emoción a Jerson,  Tomas con su sobrades, que no me molestaba sino que más bien lo hacía ver como un tipo seguro y decidido, algo interesante a decir verdad volvió a decirme, “-¡El que yo sea menor no me hace menos hombre!, tengo lo necesario para que sea una gran noche para ambos, ¡y en cuanto a tu marido, ‘no lo veo por ningún lado’, así que si no vino contigo es porque te dio vía libre para que te diviertas como tu decidas!”, eso último me borró la sonrisa de la cara porque en parte tenía razón lo que me puso muy nerviosa y para disimularlo le mostré mi copa vacía para que la llenara lo que de inmediato hizo y todos tomamos.   

 

 

“¡De acuerdo sácame a bailar y vemos que pasa!”, al pararme me impresionó como yo solo le llegaba al pecho y sus manos aunque grandes, no eran toscas más bien suaves y las mías se perdían entre las suyas, sin mencionar el tono de piel que era bien contrastado entre ambos, colocaron una ronda de canciones de bachata y éste hombre unas veces me alzaba para bambolearme a su gusto haciéndome algunas veces gritar mientras también me reía, pero era muy sensual como en más de una ocasión me levantó de la pista como si no pesara nada para él, en otras yo me separaba y le bailaba al frente sensualmente como lo ameritaba la canción, observaba como Alejandra también bailaba muy amacizada a Jerson y éste intentaba besarla y como ella no se dejaba le besaba su cuello, la altura entre ellos no era tan marcada como con Tomas pues Jerson le llevaba solo una cabeza a Alejandra, pero a mi si me quedaba a casi dos cabezas de altura de la cara de Tomas y me sentía muy chiquita entre sus brazos, movimientos y manos, cuando bailábamos pegados era incomodo para mi porque quedaba mi rostro un poco sobre su pecho haciendo que su ingle se frotara un poco con mi abdomen pero encontraba inquietante que no sentía su miembro y me parecía raro, si bien tenía curiosidad por saber como lo tenía comparado con lo que habíamos visto de Jerson su primo, sentía pena de intentar rosarme o de dejarlo, (aunque era más fácil bajar mi rostro y mirar su entrepierna, cosa que intente entre vueltas un par de veces, al parecer su miembro colgaba hacia abajo sobre su muslo, pero no se veía tan pronunciado como pasaba con Jerson y eso no sabia si me alegraba o igual me asustaba), además tenía que para mirarlo a la cara levantar mi cabeza cosa que me cansaba, así que después de unos veinte o más de la ronda de bachata con algo de reguetón Tomas entendió que el cuello  me  molestaba y fuimos a la mesa para seguir hablando y riendo como hasta ahora me tenía disfrutando la noche.

 

 

Hasta ahí solo habíamos hablado de como era el funcionamiento liberal del hotel y las parejas que lo visitaban, y me enteré que él no trabaja en el hotel sino en un gimnasio en otro hotel ahí cerca, eso explicaba su corpulencia, me contó que con su primo eran muy unidos pues viven juntos en un aparta estudio no tan cerca de allí, por eso se había demorado entre salir del turno y arreglarse para llegar; Y entonces salió el tema de como llegamos a reservar ahí, que a mi sin hablarlo con mi hermana me quedo más que claro con todo lo que hasta ahora habíamos visto y vivido, lo que le pareció muy chistoso al confesarle que mi hermana quien era la que había organizado todo el viaje y me lo estaba regalando de cumpleaños (sin decirle cuantos había cumplido), había confundido ‘hotel para adultos’ con ‘hotel liberal para adultos’, y comenzamos a reírnos a carcajadas aprovechando para tocar con sus manos mis piernas y yo retirarlas no sin dejarle sentir su suavidad un poco, su risa solo fue interrumpida por un comentario de él que erizó mi piel, “¡bendito sea el error de tu hermana que me permitió conocerte hoy y disfrutar de tan agradable compañía con olor a delicia sin explorar!”, escucharlo decirme eso tan cerca de mi rostro no solamente me descolocó,  también me excitó mucho debo confesarlo, lo que me delató aparte de mi cara sonrojada pues retiré mi antifaz para poder hablar más personal,  fue que me mordí el labio inferior por instinto, pero Tomas me miro con una mueca de seductor y siguió con su libreto de conquistador hablando como si no se hubiera percatado de lo sucedido.

 

 

Miró hacia la pista un buen rato mientras yo intentaba adivinar hasta donde él quería llegar y yo quería que él llegara, jamás había estado con un hombre diferente a mi esposo y menos me había imaginado con un hombre de color, que para nada en éste momento parecía incomodarme todo lo contrario parecía algo que se comenzaba a transformar en un fetiche de curiosidad, aun no me decidía si tener la aventura que Luis mi esposo me planteo por la tarde de manera descarada o seguirle el juego a éste chico que claramente no tenía más de 27 años y eso que se veía que era él mayor que Jerson, Tomas me apretó mi mano lo que me sacó de mis pensamientos pervertidos y al mirarlo a la cara me señaló a mi hermana y su primo los que seguían bailando pegaditos ya sin reparos dejándome fría al ver como las manos de Jerson subían y bajaban de la cola de mi hermana a su espalda rosando sus tetas por los costados a cada giro o vuelta que daban, y claro que Alejandra debía de estar sintiendo el miembro de Jerson rozarse con ella, mirábamos con complicidad y morbo la escena cuando en una de las vueltas Jerson termino consiguiendo ese beso que llevaba un buen rato buscando, lo que tomo a Alejandra y claramente la desarmó a su antojo, (que ironía, mi hermana que no le gustaban los hombres de color, ahora parecía desesperada por acostarse con uno al que le llevaba como 25 años, y yo aquí comenzando a dudar si dejaba a otro hombre cogerme a modo de venganza por proponérmelo mi esposo y mejor si era con éste mulato).

 

 

Era muy excitante ver a mi hermana sucumbiendo ante Jerson, si alguien me hubiera dicho o insinuado que esto pasaría durante el viaje no se lo habría creído, de hecho Luis intento hacerlo y no se lo creí por el contrario todo el tiempo le dije que era un simple viaje entre hermanas, y ahora había visto como dos desconocidos habían doblegado su voluntad; Tomas me hizo tomarme otros dos tragos allí con él y luego me tomó nuevamente de la mano y nos dirigimos hacia la pista, al principio bailábamos sensual pero separados y luego me fue acercando a él con sus movimientos y fuimos pegándonos sutilmente, se movía muy rico y de manera muy sensual debo reconocerlo y me iba girando y me susurraba al oído “¡mira esa pareja de ahí, ella se esta dejando acariciar!”, y me abrazaba pegando su cuerpo al mío mientras seguía moviendo sus caderas al ritmo de la música, ¡vi como la chica alcanzaba un orgasmo!, mientras por primera vez sus manos se posaron en mis senos por encima de mi vestido acariciándolos suavemente y yo solo pose mis manos sobre las de él pero no las retire, al ver terminar la chica mire a Alejandra que ya se besaba son Jerson apasionadamente y éste había logrado sacarle un seno por un costado del vestido percatándome que ella no llevaba sostén; Tomas me giró frente a él y como si no acabara de hacerme ver un orgasmo me giraba al ritmo de la música y me alzaba como su muñeca hacía otro lado de la pista donde nuevamente me susurro, “¡y ella se está manoseando con otra chica!”, claramente eran dos mujeres muy hermosas una morena y la otra rubia como yo se estaban acariciando una a la otra en frente de sus parejas quienes se deleitaban con el espectáculo, nuevamente yo estaba de frente a la escena y Tomas detrás de mí moviendo sus caderas con la música y nuevamente sus manos se posaba en mis senos haciendo que mis pezones se pronunciaran con el movimiento de sus dedos, yo solo miraba a las chicas manosearse sin control y como una de ellas se arrodilló delante de la otra metiendo su boca en la vagina de la otra sacándole gemidos que a pesar de la música yo imaginaba oír, sentí cuando Tomas con una mano acomodó su miembro que colgaba hacia abajo acomodándolo hacía arriba para facilitar restregarlo en mis nalgas y con la otra mano me sostenía del vientre sin dejar de moverse sensualmente, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo porque él estaba rosando su miembro que lo sentía más grueso que el de mi esposo.

 

 

Mis piernas se movían no por la música sino por como me sostenía Tomas y sus movimientos, las chicas ya habían cambiado entre ellas y ahora una chupaba el miembro de la pareja de la otra y la otra chupaba la de la pareja de la otra chica como si fuera algo normal; Las manos de Tomas volvieron a mis senos, pero esta vez las introdujo entre las tiras de mi vestido y mi brasier acariciándolas directamente ya sin pudor o resistencia de mi parte. Volvió a girarme frente a él pegando su cuerpo al mío, mientras yo sentía su miembro en mi abdomen, sus manos recorrían mi espalda y ya mi respiración era agitada a más no poder, levanté mi cabeza para mirarlo y pedirle que me dejara regresar a la mesa o terminaría allí mismo entregada a él,  por un momento nos miramos fijamente y pensé que me besaría pero su boca se acerco a mi oído y susurro nuevamente, “¡nunca había tenido algo tan delicioso entre mis manos, sabes!, no imagino el sabor tan delicioso que tienes, ¡muero por descubrirlo y saborearlo!” ni mi esposo me había dicho algo tan delicioso de escuchar para mis sentidos, sus palabras las escuche en mis oídos pero fue como si se las hubiera dicho a mi clítoris con su lengua donde las sentí, mi humedad era palpable y lo descubriría en algún momento a éste paso.

 

 

Me moje con solo una frase sacada de algún manual de seducción pero que funcionaba perfecta para mi en ese momento al escuchárselo decir, instintivamente lo abrace  pasando mis brazos por su cuello lo que él aprovecho y me levantó con sus manos primero de mis caderas  y luego las pasó a mis piernas agarrándolas y logrando hacerme rodearlo con ellas para no caerme, sus manos comenzaron a acariciarlas mientras yo intentaba en un momento de cordura decirle, “-¡que haces bájame!, ¡todos nos están mirando!-“, yo miraba a todos la dos y algunas parejas nos miraban, eso me hacía sentir extraña pero al mismo tiempo me producía hormigueo en mi estomago y vientre, pero él no escuchaba de razones o motivos y sus manos ya se apoderaban de mis nalgas por debajo de mi falda lo que me hizo estremecer temblando y repetirle una vez más, “-¡bájame que me siento incomoda con sus miradas!-“ pero él rozando con sus dedos mi entrepierna me susurró, “¡No te incomoda,… Te excita que te vean y verlos a ellos mirarte!-“, volví a mirar a mi alrededor y me di cuenta que era cierto, que no me daba pena me excitaba como me miraban e instintivamente cuando volvió a rozar sus dedos con mi entrepierna no pude contener un gemido que me hizo mordiéndome mi labio inferior, voltee a mirarlo de frente y le dije “-¿y ahora que hacemos?-“, con cara de niña buena esperaba su respuesta mientras sus manos no dejaban de acariciar mis piernas, mi entrepierna y las subía a mi espalda como si quisiera arrancarme el vestido, “¡pídeme que te haga mía!, ¡pídeme lo que quieres que te haga!”, yo abrí mis ojos con ansiedad y angustia pensando que de verdad estaba ahí esperando que yo le dijera que quería sentir su miembro penetrándome, que quería sus dedos y su lengua recorriendo todo mi cuerpo y que si me daba el placer que mi cuerpo anhelaba en ese momento podría hacerme lo que deseara en sus más bajos pensamientos, algo en mí deseaba portarme como su puta y saborear ese miembro hasta llenarme de su semen, ya quería que él se sacara su miembro y me lo dejara ver, pero solo balbuceé “¡quiero que me hagas tuya!” y por primera vez en la noche yo fui la que lo bese con demasiada pasión y lujuria, como nunca había besado a mi esposo y nos besamos como dos adolecentes sintiendo como una mano suya apretaba mis nalgas y la otra sacaba uno de mis senos y los chupó como si se le fuera la vida en ello.

 

 

Me dejó bajar no sin antes manosear todo mi cuerpo levantándolo y dejándome a la vista del que quisiera mientras me deslizaba hacia abajo y su miembro palpitaba contra mi vientre, era tanta la excitación que tenía que quise tocárselo como quiera que hasta ahora no lo había hecho, y posé mis manos pequeñas sobre aquello que llevaba excitándome cada que bailábamos, al posar mis manos sobre él sentí como un miembro rígido y largo palpitaba entre la tela se su camisa y mis dedos que no dejaban de recorrerlo adivinando su tamaño; Ya no era yo, ya mis manos se movían a su antojo o por instinto o lujuria no recuerdo jamás sentirme así con mi esposo, lo giré para comprobar donde estaba mi hermana y si se había dado cuenta de mi actitud vulgar y descarada. Alejandra ya no estaba en la pista, ellos estaban sentados en la mesa besándose de manera desinhibida, ya no importaba donde estábamos o quien nos estuviera viendo, solo había lujuria en el ambiente y nosotras éramos parte de ello, saqué por primera vez de su bermuda el miembro de Tomas quedando impresionada al verlo erecto ante mi, imponente, venoso como jamás había visto uno en mi vida, lo acaricie con mis manos que resaltaban por su color, completamente depilado no se que tamaño tendría evidentemente superaba unos 20 centímetros pero mis ojos no miraban nada más, y mis manos lo recorrían de arriba abajo descaradamente hasta que una mujer acercándose a nosotros dijo “¡es hermosa entre tus manos!” y sin preguntar le dio un beso en la punta ante mi mirada atónita de lo que acababa de ver, lo que me hizo reaccionar y pedirle a Tomas que regresáramos a la mesa.

 

 

Al llegar a la mesa solo veía a Jerson preocupándome por no ver a mi hermana con el,  hasta que al acercarnos vi como Alejandra estaba chupándosela a Jerson con sus tetas al aire y su vestido enrollado en su cintura, como pude atónita me senté impávida viendo la escena de mi hermana y su amante, mientras Tomas no perdía el tiempo y me acariciaba chupando mis pezones que estaban más que sensibles por sus labios pero sin dejar de ver a mi hermana como intentaba meterse ese miembro en la boca claramente más grande y grueso  que el de su primo, pero solo tenía su glande y unos centímetros inmersos en su boca, la veía bajar y subir lamiendo su tronco y regresar a chuparle el glande hasta que escuche a Tomas susurrarme “¡quiero que hagas lo mismo!”, y sentí como su mano sobre mi cabeza me iba haciendo bajar a chupársela ahí delante de mi hermana, su mano sostenía mi cabello y la otra su miembro que casi rosaba con mis labios, no había voluntad sin su mano yo misma bajaría a lamerlo, su sabor era embriagante lo que me inspiro a lamer y chupar una y otra vez guiada por sus manos dejándome probar lo más delicioso que había mamado en toda mi vida, mis tetas era manoseadas por su mano libre por más de quince minutos hasta que yo sentí como mi boca se llenó de semen abundante y espeso, pero no deje de mamársela hasta recibir toda su descarga; Levante mi cabeza y mi hermana estaba observándome silenciosa con mirada de lujuria hasta que Jerson le aviso que también estaba llegando y ella solo se agacho y la chupo en la misma forma que un instante antes yo lo había hecho con Tomas, tragando todo lo que salía de ese miembro hasta dejársela limpia, nadie dijo nada, solo nos mirábamos sin soltar sus miembros con la firme intención de consumar mi infidelidad y la lujuria de mi hermana, Alejandra termino y como lo más normal beso a Jerson y mirándonos dijo, “-¡necesito continuar con esto!, ¡sugiero que vayamos a nuestra habitación o te cabalgo aquí delante de mi hermana y toda estas personas!”.

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