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Cuando mi amiga me contó lo que le pasó me tuvo duro por todo el día. Resulta que para poder pagar su colegiatura empezó a vender "servicios". Debido a su físico no le fue difícil conseguir buenos clientes y descubrió que podía ganar en una hora lo que otros ganaban en una semana, así que siguió haciéndolo. Una tarde, se puso de acuerdo con un tipo para verse en un hotel cercano, se trataba de un viejo gordo y mal oliente, pero que aparentaba tener mucho dinero, ella le dio una suma casi imposible, esperando que se negara, pero el tipo aceptó. Al tenerla en frente se dio cuenta de que el hombre llevaba mucho tiempo sin tener sexo, se le notaba en la mirada, depredadora, hambrienta. Después de calentarlo un rato, el viejo la recostó en la cama, hizo ademán de besarla, pero ella lo detuvo, sin saber que solo era una distracción. El viejo aprovechó ese momento para esposarle una muñeca a la cabecera de la cama. "Ahora sí nos vamos a divertir" le dijo, abofeteándola un poco mientras se sacaba la verga. Forcejeando un poco, el viejo le esposó la otra mano y luego la amordazó para que no gritara, mi amiga se retorcía sin poder liberarse. Encantado con lo que estaba viendo, el hombre empezó a frotar su verga entre sus tetas, usándola como si fuera un simple objeto. Después de usar un rato esas tremendas ubres, empezó a chuparlas, morderlas, hasta que dejarle marcas. Mi amiga gemía de dolor, mientras sentía como esas manos la exprimían. Luego vino lo peor, animado por tenerla indefensa, el viejo le abrió las piernas y la penetró sin descanso. La tuvo así, bien ensartada, mientras le pasaba la lengua por las mejillas y el cuello, saboreando su sudor, observando la expresión resignada de su presa. Después de una hora salió de ella, echándole todo su semen en el cuerpo, marcándola como su territorio. Mi amiga se sentía sucia, usada, creyó que por fin la soltaría pero en lugar de eso, el viejo volvió a apretarle una de sus tetas diciendo "Si crees que ya terminamos, estás muy equivocada. Aquí te vas a quedar hasta que nos hayas complacido a todos" luego de eso le vendó los ojos y abrió la puerta de la habitación.
Durante más de seis horas, mi amiga fue violada por varios sujetos, mucha pudo ver sus rostros, solo sintió como sus malos se apoderaba de ella, turnándose para meterle la verga, primero por la vagina, luego por el culo, para luego hacerla limpiar con la lengua. Cuando terminaron con ella la dejaron exhausta, cubierta de semen y orina, horas más tarde se recuperó y volvió a casa, no sin antes ver el billete de veinte pesos que le habían dejado pegado en medio de sus tetas, como una burla.
Cuando me lo contó, mi amiga estaba deshecha, pero yo tenía la verga dura, sobre todo porque, aunque ella nunca pudo reconocerme, yo sí recordaba todos los detalles de aquel día.
Resulta que el viejo era mi vecino, al saber sobre las actividades de mi amiga, decidí que era mi oportunidad de hacerla mía, así que convencí al viejo y sus hijos de armar la cita, bastó con enseñarles sus fotos para que accedieran.






