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Perreo Social (Parte II)

Toda historia tiene un orden cronológico, te invito a leer la primera parte para entender el contexto, y la situación que escribo en este nuevo relato.

https://guiacereza.com/experiencias/post/68308/perreo-social

Ha pasado un mes desde que Mario y Daniela nos visitaron, y en una fiesta las cosas empezaron a salirse de control. Durante este tiempo hemos tenido conversaciones grupales, individuales, maritales tratando de entender un poco de lo que estamos sintiendo y viviendo con ellos. El juego ha avanzado rápido y de manera interesante. Creamos un grupo de whatsap los 4 donde intercambiamos anécdotas, fotos, audios, encuestas, fantasías y retos, mientras en paralelo intercambiamos pareja a través del sexting para continuar conociéndonos. 

Liz tiene una cara diferente estos días, se le ve alegre, coqueta, curiosa, transpira seguridad, confianza, está más sexy que nunca, se ve empoderada, estoy seguro se siente una diva al tener 2 hombres detrás de ella…Me la disfruto locamente, no hemos parado de tener sexo diariamente desde que esto empezó, no hay espacio para descansar o dejar de hablar, cada minuto, cada momento es aprovechado para liberar nuestras ganas, fantasear, pensar en que pasará en los próximos días y hasta donde estaremos dispuestos a llegar. 

Es un juego un poco extraño con emociones nuevas. Disfruto de la sensualidad, el coqueteo, el morbo en las conversaciones, en retos de fotos, audios, videos que a diario calientan nuestras conversaciones, sin embargo también hay una adrenalina, un vacío a la incertidumbre, tal vez algo de miedo a dejarme llevar por mi “yo animal, salvaje” y causar incomodidad en mi esposa. No logro entenderlo todo, no se si afortunadamente o desafortunadamente vivimos en ciudades distintas, tenemos espacio para respirar, reflexionar …aunque también quisiera que estuviéramos cerca para vivir el momento al máximo.

Todo esto ha abierto un canal de comunicación directo y jocoso en nuestra relación , creemos que estamos listos para dar un nuevo paso y dejarnos fluir un poco más, ahora es nuestro turno de visitar a Mario y Daniela. Liz debe viajar por trabajo, yo lo haré por ocio llegando un día después. Tenemos reserva en un hotel que está a completa disposición para que pase lo que tenga que pasar. Trato de entender la situación, estar tranquilo, preguntar a mi esposa que tiene en mente o qué cree que sucederá, sin embargo ella algo nerviosa simplemente dejará que las cosas fluyan. Para mi, es muy claro lo que pasará aunque ella no me lo diga. 

Mientras Liz empaca su maleta, la acompaño, escogemos juntos su lencería para el fin de semana que se aproxima, me calienta, me provoca, incluyo unos condones, nos miramos y nos reímos nerviosamente, no sabemos si estamos exagerando pero mejor estar preparados. Ella llega un miércoles a su destino, trabaja durante el día mientras me confirma que en la noche saldrá con Mario, a comer, rumbear y dejar que la noche fluya si las cosas se dan. Yo saldré también al finalizar el día con una compañera del trabajo, aunque será un plan tranquilo de amigos teniendo en cuenta que solo hay una amistad, no hay ningún interés físico entre las partes, y si lo hubiese, ella no hace parte del proceso de exploración que estamos viviendo.

Se llega la noche, mientras Liz se arregla, me comparte algunas fotos. Hoy lleva puesta una lencería negra con algunas transparencias, acompañado de unos ligueros que se notarán fácilmente debajo de su falda negra. Una camisa blanca, y unos tenis del mismo color que la hacen parecer una deliciosa colegiala que va en busca del profesor para ganar la materia. Chateamos un poco hasta que recibo el mensaje “saliendo”. Previamente acordamos darnos el espacio, simplemente avisarnos donde vamos a estar sin entrar en detalles (esos los hablaríamos al finalizar noche).

La noche y la curiosidad avanzan pero aún estoy tranquilo. Estoy comiendo con mi compañera, riéndonos un poco tratando de esconder mis nervios, de distraer mi cabeza hasta que tipo 11pm llega el mensaje detonante de mis sensaciones:

Liz: Amor vamos para el hotel.

Yo: ¿A dejarte? O ¿a quedarse?.

Liz: Va a subir. ¿Tú estás bien?.

Yo: Estoy bien, disfruta.

Sentí caer en un vacío infinito a toda velocidad, ufffffff…..intento respirar y controlar algo que estoy sintiendo , sin entender qué es. ¿Qué pasa? Hemos hablado del tema, estamos de acuerdo en avanzar, en tener sexo con Mario o Daniela, llevamos varías semana meditándolo, fantaseandolo, decidiéndolo. Durante el día he intentado hablar con Daniela, sin embargo siento que ella también está un poco ansiosa por lo que está pasando, y prefiero no estar mucho en contacto, al menos yo no quiero arrastrarla conmigo al vacío…

Pasan los minutos, las horas y no tengo noticias aún de Liz. Mi compañera de la noche, me nota raro y pregunta en varias ocasiones ¿estás bien?, a lo que respondo de manera afirmativa, mientras sigo intentando comprender mis sensaciones, mientras mi mente crea una película de todo lo que está pasando en este momento en esa habitación. No aguanto más , me despido y regreso a casa. Allí, la mente juega más fuerte. En silencio y solo, no queda otra opción que pensar e imaginar: ¿Está pasando rico? ¿Le hicieron oral? ¿Ella hizo oral? ¿La tienen en 4? ¿Está gimiendo rico? ¿Quien tomó la iniciativa? ¿Como lo estará masturbando? Etc etc…..mil preguntas que te haces y te llevan a la realidad, a cuestionarte e interiorizar que ella es libre, que no es mi propiedad, que como cualquier ser humano tiene deseos, ganas, fantasías y solo hay una vida para cumplirlas, sin depender necesariamente de mi.

La noche se me hace eterna, no logro conciliar el sueño, me masturbo en 3 ocasiones tratando de liberar un poco la tensión. Mierda, nunca hablamos de que se quedara a dormir, ¿estarán arrunchados durmiendo?, ¿Se olvidó de mi?…la cabeza es el enemigo #1 en esta situación, seguido de la distancia (al menos para mi). Finalmente 2:30am recibo un nuevo mensaje “Mario ya se fue” al cual respondo rápidamente, e iniciamos una videollamada.

Entre cansancio, sueño y curiosidad pregunto por detalles, quiero saber cada movimiento, cada iniciativa, cada acción para aterrizar las cosas que pasan por mi cabeza, no quiero imaginarlo más. No es una conversación fácil, para Liz debió ser incómodo compartir algo de información (no todo se comparte en esa primera charla), para mí era una necesidad, sin embargo mi expresión facial transmite tristeza, confusión y mi esposa lo percibe. Después de un buen rato hablando, o más bien de interrogación, nos despedimos. Ojo, si estas dispuesto a preguntar, no te sorprendas con las respuestas, valida primero si estás preparado para hacerlo….

Inicia el Jueves como un día normal de la semana, llego a mi oficina lidiando aún con mi cabeza, los mensajes con Liz son muy cortantes de mi parte, sigo procesando información y no quiero involucrarla en mi tormenta interna, pero a la vez siento que hoy no tengo su atención. Racionalmente tomo la iniciativa y le escribo: “hoy es un nuevo día para recordarte lo mucho que te amo!!! Me encanta estar en esta exploración contigo, donde encontraremos varias sensaciones que debemos aprender a canalizar. No veo la hora de llegar y darte tu merecido”

Necesito verla, abrazarla, acariciarla, hablar de nuevo, el día se hace largo y no logro concentrarme en el trabajo. Mi curiosidad me llevan a seguir preguntando cosas que no me ayudan a descifrar o entender mis emociones ¿hoy te quieres ver con Mario de nuevo?, mientras Liz presionada, responde con información poco concreta y ambigua. No entendí su posición y en mi afán de querer saber más y más, solo estaba llenándome, inconscientemente, de rabia, orgullo, intranquilidad y motivos para cuestionarla e intentar dar un golpe de vuelta, que sintiera lo que sentí la noche anterior mientras ella disfrutaba. Se lo hago saber, estoy sensible, lidiamos con las emociones mutuas, tratamos de comprender posiciones, sin embargo los mensajes son duros, crudos y no queremos adornarlos, nos hablamos con completa sinceridad emocional, sexual, sin filtro, como nunca antes lo hemos hecho sin saber los efectos colaterales.

En este momento, supongo Liz también lidia con sus propias emociones.Por un lado, me tiene a mi interrogándola, cuestionándola, compartiéndole todas mis sensaciones que no la hacen sentir bien. Luego está su confrontación personal, sus sensaciones de haber superado la barrera ética y moral con la que a casi todos nos han criado, señidas a las reglas de una sociedad morronga; redefinir los valores que han sido inculcados por sus padres, aceptar que lo de anoche lo disfrutó’y quiere repetirlo, sin hacerme sentir mal. Y finalmente, también se pone en los zapatos de Daniela, sabe que ella también está incómoda, no quiere pasar por encima de ella, ni de nadie.

Llegamos a un punto en el que decido desentenderme de la situación, no quiero saber nada más por hoy, al menos hasta esa noche que llego. Se lo hago saber a Liz: “No te presionaré, sal no hay problema…nos vemos en la noche”….

Llego al hotel a media noche, nuevamente mi comunicación ha estado cortante en las últimas horas, no quiero hablar hasta tenerla en frente. Liz baja a recibirme a pesar de que el ambiente está tenso, nuestro saludo no es efusivo, nuestras miradas se esquivan y hablamos en voz baja sin saber qué decir, hacer o preguntar. Las sensaciones incómodas deben compartirse, hay que liberarlas , sin embargo por el contexto parecerán más ataques que desahogo. Este día quería toda su atención para mi , sentí que me hizo a un lado desde temprano a pesar de no ser así, mi cabeza todo el dia estuvo jugando en contra, hasta comparé la manera en que estaba vestida vs como había salido la noche anterior. 

“Tengo una confrontación de sensaciones Yo con Yo, tú no has hecho nada por fuera de lo acordado, pero mis emociones y mi cabeza me tienen mal. 

¿Te lo comiste? Si…eso lo habíamos hablado y estaba en los planes.

¿Saliste con lencería y en falda bien mamasita? Si… yo mismo escogí tu ropa.

¿Lo llevaste al hotel? Si…te dije que podías hacerlo.

Entonces, ¿qué es lo que me tiene así? En ningún momento dije NO.

Nos sentamos a hablar en la cama del cuarto, cada uno en su lado manteniendo distancia, ambos tenemos cosas por decirnos pero claramente yo estoy más cargado. Ella no ha hecho nada por fuera de lo acordado, todo fue minuciosamente planeado por los 2, inclusive la ropa con la que saldría esa primera vez con Mario, pero las sensaciones que se levantan y se remueven, te sacan fácilmente de casillas, vas a querer cuestionarlo todo, pegarte de cualquier palabra, acción y armar una pelea en donde claramente tú eres el gran culpable del caos.

Previo a mi llegada no sabia si habían vuelto a salir, en medio de mi impotencia, de mi rabia solo evite llenarme de mas motivos falsos. Durante la charla me contó que salieron, fueron a un motel a comerse, contándome algunos detalles del nuevo encuentro, pero no presté mucha atención. Mi cabeza ya estaba armando una nueva tormenta …sabe que no estoy bien, emocionalmente estoy afectado y no le importo; le pudieron más las ganas que darme atención. Mi yo racional hace un alto y se pregunta: ¿en algún momento le dijiste No salgas?. Booooooooom ese choque entre lo emocional y lo racional es lo que me tiene así…

Mis mensajes a pesar de estar hablándolo en tono calmado, la hieren, la hacen cuestionarse. Tenía rabia con ella misma por haberse dejado llevar, haber aceptado el sexo con Mario, haberlo disfrutado porque sabía cual iba a ser mi reacción, y ese ha sido su mayor temor desde que empezó esto. 

Estuvimos hablando muy buen rato, ambos descargamos , liberamos sin ser groseros, sin subir tono de voz, sin hablarnos feo, nuestras sensaciones de miedo, vacio, cuestionamientos. Finalmente entendí que, yo, lo único que necesitaba era un abrazo de ella, sentirla cerca. Sale a la luz una pregunta clave, un mensaje que rompería cualquier ambiente tenso y daría claridad a ambos del rumbo que tomaríamos…

Liz: ¿y si te quiero comer , qué hago?

Mi respuesta fue coger con fuerza su nuca y besarla, besarla con pasión , con deseo, recordandole que me encanta , que la amo , que solo necesitaba de un abrazo suyo , de una caricia para calmar mis sensaciones negativas. El sexo fue exquisito, de reconciliación , de rabia, de alivio, nalgadas fuertes en forma de reclamo, gemidos profundos en muestra de arrepentimiento para después ahogarnos en un orgasmo mutuo y caer exhaustos esa madrugada.

Este relato habla de mis emociones (Juan), puede no ser sexualmente explícito y apasionado, sin embargo estoy seguro que más de uno puede identificarse con este tipo de confrontaciones. Si estas pensando en abrir un poco tu relación, prepárate para una liberación de emociones y sensaciones nunca antes vistas, que debes afrontar en pareja con mucha COMUNICACIÓN y EMPATÍA.

El fin de semana apenas empieza, tenemos viernes y sábado para seguir explorando…ambos estamos en esta ciudad por Mario y Daniela…. 

@pareja_juanliz

Parejajuanliz

Somos pareja swinger

visitas: 1960
Categoria: Intercambios
Fecha de Publicación: 2023-01-10 23:50:22
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7 Comentarios

Me encanta tú forma de redacción. Gracias por tocar esas sensaciones que cómo dices vienen con la programación que tenemos por nuestra sociedad machista y doble moral. Me gustó lo que dijiste. A veces nos creemos dueños de nuestra pareja y olvidamos de que cada uno sentimos, tenemos necesidades individuales, necesitamos nuestros propios espacios y estos espacios nos hacen vivir, recargar y oxigenar la relación, nos hacen sentir vivos y nos dan seguridad y cuando lo hacemos en consenso va a enriquecer nuestra relación. Felicitaciones y gracias por mostrarnos el otro lado de este tipo de aventuras. Excelente

2023-01-13 16:03:54

Chévere el artículo, se percibe la genuina intención de plasmar tus sentimientos. Es duro la primera vez, y si les gusta súper bien y si no les gusta también está bien. Todo son percepciones y puntos de vista, lo genial es que ambos hagan todo de manera conjunta y acordada. Excelente relato.

2023-01-13 03:42:03

es un adefesio de lectura si fue que ambos quisieron explorar por que reproches lo que es un monigote

2023-01-11 17:41:25

Wow, que vaina tan impresionante. Aunque no he vivido una situación similar, me identifique con sus sentires. El relato te absorbe y te lleva a sentir que es uno al que le está pasando. Felicitaciones hermano, que bien redactado.

2023-01-11 14:53:27

pues amigo que te digo yo he vivido esa situación pero a diferencia tuya yo estaba de viaje eso fue en nuestros inicios y yo si me llene de mucho amor claro no te lo niego la angustia la zozobra existen pero todo esto es morbo y este mundo liberal que escogimos pues yo disfruto mucho los encuentros que tiene mi esposa y que luego me relata o a veces se graba y me envía los videos eso me encanta y mientras mas confianza le des ella se va a sentir mejor y mas apoyada pero si tu estas con tantas dudas y te las trasmites ella se va sentir insegura y de pronto desiste de estilo de vida que me parece lo mejor para salir de monotonía

2023-01-11 14:49:47

Estimado Juán un comentario respetuoso, nunca se te olvide que el mundo o ambiente swinger se originó, se formó, se desarrolló y se hizo en el mundo entero bajo una sola premisa: ENRIQUECER LA RELACIÓN DE PAREJA, cualquier cosa que se salga de ese parámetro y de ese límite pude ser muy nocivo y perjudicial para la relación de pareja, la gente cree erróneamente que el swinger es para "cachos consentidos mutuos" o prostitución disfrazada, o liberalidad y libertad sexual, y cuando se toma o se usa así es inevitable que el final sea la ruptura de la pareja.

2023-01-11 05:09:51

Te entiendo perfecto y si es un torbellino de sensaciones que has sabido plasmar.. Saludos

2023-01-11 01:16:30