"No soy como los demás, y quizás eso me hace invisible para ti. Pero tengo 55 años y he aprendido que la vida no se trata de pasar por encima de los demás sin mirar, sin conocer. La soledad es un peso que se lleva con dificultad, y cuando se encuentra a alguien, la empatía es el puente que nos conecta. No todos la valoran, y se gana o se pierde en el intento. Pero aquí estoy, un extraño que busca una amistad, una cómplice, una amante, una pareja, una esposa. Alguien con quien compartir la vida, con quien reír y llorar. No te pido que me aceptes sin conocerme, te pido que me des la oportunidad de mostrarte quién soy. No soy el mismo de antes, he cambiado, he crecido. La vida me ha enseñado que la conexión verdadera es un tesoro. ¿Quieres dar el primer paso y conocerme? ¿Quieres descubrir la chispa que puede nacer entre nosotros?"