Ordenar por:
Filtrar por periodo: :

Abajo
Las palabras fluían, la cerveza también. Cada roce tuyo era una traviesa caricia que ardía… y no decía amén.

Entre juegos y secretos
Entre risas, miradas y pactos discretos, llegaste tú, huésped de nuestros secretos.

SILENCIO A TRES VOCES (Confesión de Valeria). FINAL
Respiró profundo, apretando las manos sobre sus piernas, tratando de ordenar el torbellino dentro de su pecho.

SILENCIO A TRES VOCES (La línea que no existía)
No sentí orgullo. Tampoco remordimiento. Sentí algo peor: la conciencia de haber querido lo que no debía, durante demasiado tiempo. Y de que, al final, lo había conseguido.

SILENCIO A TRES VOCES (Donde termina el pacto)
Yo también la recordaba. A ella. Esa noche. Su espalda descubierta al salir del baño. El temblor en sus dedos al sujetar la manta. La forma en que su cuerpo evitaba el mío con una delicadeza que dolía más que un rechazo direc...

SILENCIO A TRES VOCES (A veces, el silencio)
Tal vez fue el modo en que caminó hasta el dormitorio, descalza, con pasos más lentos de lo normal. O el modo en que evitó mi mirada. O la piel —su piel— aún vibrante, como si no quisiera olvidarse todavía del tacto de otros...

SILENCIO A TRES VOCES (Lo que no se dice)
-Pero no se movió. Y él tampoco. El silencio se alargó entre ellos como una cuerda floja que ambos sabían que, tarde o temprano, cedería.-

A ti, mujer de fuego lento
A ti, mujer de caderas que dictan sentencias, de senos como promesas que se cumplen con la boca llena de ansias, a ti, que caminas con la seguridad de quien ya ha probado todo… y aún quiere más.

Mi ritual
Tú que eres deseo con cuerpo de demonia.Ven, no vengas con ropa.Ven con tus pecados y tus ganas.Ven como en mis sueños:con la lengua dispuesta, con la mirada que sentencia.Si no vienes, seguiré el ritual cada noche,hasta que...

Quien soy?
¿Quién soy yo? El que no solo te mira… te imagina. El que no quiere tocar tu cuerpo primero, sino tu deseo. Soy ese pensamiento que te roza por dentro cuando estás sola… el que haría de tu piel un poema, y de tus gemidos, mús...

EN TU MEMORIA
Como siempre, mi musa silenciosa visitándome en mis sueños