Hace mucho que no escribía por acá, pero bueno uno desparchado, relajado y pensando en culos y chimbos se anima un poco a hacerlo.
Me gusta escribir detallado, el relato es largo pero detallado, así que si tiene la mente despejada para meterse en el cuento, léalo, sino relajado, siga explorando. Para los que no son paisas, me disculpan las expresiones, pero ya saben “parce y guebon” Son expresiones que nosotros utilizamos para todo.
Experiencias, todas las de la vida, por alguna razón que desconozco (si la conozco y es mi verga) nunca me falta el mancito para culiar, generalmente conocidos con los cuales se va dando el tema a pesar de ser un poco serio y tímido para estas cosas, pero las cosas se dan y se dan de una manera, que ufff, que rechimba. La regla, solo una y es que sean manes menores que yo pero que no sean de esos pollos interesados, me fastidian.
En esa época de colegio, en la que salíamos a realizar caminatas por ahí a disfrutar sitios en esos días festivos entre semana, salimos un grupito de puros manes, machos todos a una cascada a tirar charco. Pues si, así fue, salimos animados, con el mekato, pantaloneta y lo básico, era un parche relajado y tranquilo, nada de licor y otras vainas porque no era ese el objetivo.
Había un compañero que me gustaba, pero no se había dado nada, no sabía si le tramaba o no el cuento, solo lo miraba a veces, le sonreía y charlábamos de cosas normales, ni me atrevía a meterle morbo a la cosa porque me daba miedo que depronto se me ariscara. La cosa es que en ese parche, nos fuimos caminando mucho rato juntos y hablamos un poco más de cosas más personales, ambos interesados, atentos e inquietos de la vida del uno y del otro. De un momento a otro, metió la pregunta que nunca falla, se los aseguro, nunca falla.
Hey Parce. ¿Y vos tenes novia?
La respuesta mía, en dos fases, en la cara pícara y ayudada por la expresión, ¡no nada huevon!, sólo marica, por ahora.
Ah parce, como así, pensé que tenías novia huevón.
No parce, nada. Relajado con eso. Y Vos, tenés novia, no te he visto con nadie.
Tampoco guebon, no tengo.
Ah como así, ósea que los dos desnoviados, vea pues. (Con tonos ya más pícaros.) Y añadí, al menos ya sabemos cómo desfogamos jajajaja dije yo, y me reí.
Cómo así? dijo mi amigo.
Si, ya sabemos huevón, uno sin novia, como desfoga, con paja, no marica?
A obvio, pues con que más, paja y porno, respondió el.
Acá ya fue, dije dentro de mi, esto no lo puedo dejar enfriar. Me dio chico y de acá saco algo.
Seguimos hablando, por supuesto íbamos en grupo pero pues retirados de los demás para poder hablar tranquilos.
La conversación siguió, nos salimos del tema pero ya había quedado abierta la posibilidad.
Después de otros temas, me dio tiro de preguntarle:
Hey parce, que porno ves cuando tiras paja?
Parce no, páginas que busca uno por Google.
Porque, vos que ves pues? Me pregunto.
Si, lo que le tiré a uno Google, lo que sea, le recalqué. respondí.
Parce, pero no hablemos de esa chimbada que lo que pasa es que me caliento, y maluco huevón uno tener que tirar paja por acá en el monte. Me dijo mi amigo.
Parce, pues que cagada cierto, pero la paja por ahí en un matorral si es chimba, lo que pasa es que como no hay buena señal, porno ni chimba, le dije yo.
Ah, si parce, es verdad, toca es a punta de imaginación, con que más pues? Dijo mi amigo.
Jajja, si marica, sin ayudas. Lo malo es que a mí se me está parando guebon. Le dije.
Marica, a mi también parce, obvio, de solo pensar en paja, se me va poniendo dura, y sabes que, las huevas me están doliendo porque hace rato que ni chimba. Dijo ya en tono mucho más morboso mi amigo.
Ambos ya sabiamos para dónde iba la cosa, el tema es que íbamos en grupo. Por eso, nos fuimos quedando atrás, dejamos que los demás compañeros pasaran y nosotros con alguna excusa nos quedamos de últimos.
Le dijimos a un parcero que estaba cerca de nosotros y quería socializar, pero yo lo despegué y le dije que si preguntaban por nosotros, que relajados, estábamos tomando unas fotos, más tarde nos reincorporábamos al grupo.
Y ahí fue!! La excusa, ambos ya solos separados del grupo, calientes y con el tema introducido: la paja.
Mi amigo, una chimba, de cara bonita, trocito pero no gordo, barbaito, con unas piernas y un culo, uffff, de edades muy similares, una voz chimba de macho, pechito medio belludito se le veía porque no había explorado hasta allá, en fin, un man chimba, pintica.
Yo un man, alto, trozo también en ese momento, velludo y barbado, con buena pierna y pues no se, me imagino que un culo normal. Machito, seriecito. En fin ya sabíamos que queríamos.
El grupo se alejó, nosotros que tales, tomando fotos, viendo paisajes, disimulando ya de los demás para quedarnos atrás.
Retomando, le pregunté, guebon, como así que te duelen las huevas, cuando hace que no tiras paja?
Sabes que, me respondió. Hace mas de una semana, dizque juicioso me puse, pero parce, las huevas se le llenan a uno, y esa chimbada duele mk cuando se le para a uno el chimbo.
La verdad si, a mi me pasa, le dije. Cuando me demoro en descargarlo, lo primero es que se la para con nada y lo segundo es que le duelen, sino es que tiene uno un sueño mojado.
Hey y si hace más de una semana no tiras paja, cuando hace que no culias?
Jaja parce, pues imagínate. Hace ya más de tres meses guebon no remojó la brocha.
A no guebon, estás virgen de nuevo. Jajja parce, mera abstinencia. Que pasa pues?
Mira como estoy guebon! Le mostré mi verga y me la agarré. Obvio ya parada y se notaba por debajo de los mochos.
Pues parce, yo no me quedo atrás, mira este chimbo como está? Esta que se sale, me dijo y por supuesto que chimba el bulto que se le notaba.
No parce, aquí no hay de otra, vos me pusiste muy caliente guebon, acá ya toca hacer algo. Le dije yo agarrandome el chimbo.
Metamonos por acá, ya esos manes van muy adelante, por acá nos metemos por este rastrojo donde podamos relajarnos, me dijo y salió adelante saliéndonos del camino.
Que hija de puta chimba, corone, dije yo mientras le miraba ese culo tan chimba, todo grande y redondo y mientras me tocaba el chimbo por encima del boxer, al punto que mi amigo voltio y me dijo:
Parce, que? Esta que se le sale, así de grande es o que?
Pues guebon, Pa que le digo mentiras, está chimbada esta que se sale. Esta es pero antojada, mire hacer que va a hacer para calmarla, porque le digo, esta es pero reparada.
Hágale papi, me dijo, que por acá ya solos, lo que vamos es a pasar una chimba. Ésa verga está como rica jajaa .
No y la suya huevon, y ese culo mk? Estoy es que me empeloto parce.
Ha! y es que le gusta el culo? Me pregunto.
No, parce no, no me gusta, me encanta. Y ese suyo, marica está como me lo recomendaron.
Pues parce, estábamos hablando de tirar paja, no de culiar guebon, yo no soy cacorro, me dijo en una voz toda burlesca y pícara. Algo sarcástica pero ya muy caliente todo el ambiente.
No sos cacorro, pero te venís con un man, hablando de pajas y vergas. Yo no creo que no le guste la vuelta. Jajaja no tendrías esa verga parada a punto de estallar.
Parce, a mi si me gusta la vuelta, y si le digo la verdad, pensando en usted me he tirado más de una paja.
Papi, llego la hora, vea, los dos solos, por acá en el monte que rechimba. Ud cargado, con esa verga a mil, ese culo pidiendo verga Y yo con ganas de pegarle una pinchada bien chimba. Yo insistiendo en dominar la situación para que se hiciera a la idea de que yo me lo iba a comer.
Parce pero quien le dijo que le voy a dar culo. Hay que esperar haber guebon, además a mí también me gusta meterla y en ese culo que chimba. Se bajó en ese momento la pantaloneta a media nalga y abajo unos boxer blancos que me volvieron más loco, mejor dicho, casi me le tiro a tocarle ese culo. El Marica estaba jugando conmigo, pero yo esa se la cobro, me dije muy dentro de mi, me la cobro!
Llegamos a un sitio tranquilo, cerrado por maleza y con luz tenue, no directa, discreto y oculto a la vista del camino, mejor dicho el punto perfecto para hacer lo que se nos diera la gana. Estábamos tranquilos, muy ganosos, arrechos con las vergas paradas, ganosos de tocarlos, de mamar verga y de culiar bien chimba. Ambos estábamos en un ambiente de sexo de querer desnudarnos todo y ver que teníamos ambos, él estaba Ganoso de mí y yo de él, ya nos habíamos confesado. Ambos nos gustábamos, por lo que se venía de ahí en adelante era puro sexo, sexo chimba, sexo duro, de ese que lo hace uno con ganas y en esa locación, una locura.
Y así fue….