Yo no se que tiene la mujer costeña que me encanta, me matan. La siguiente historia es sobre una amiga, que conocí en Guia y con la que pocas veces nos vimos, era más lo que chateabamos, a veces chats muy calientes, pero en general era una relación virtual y cordial. Un dia decidimos vernos, por chapinero claramente, a tomarnos unas cervezas y hablar, fue gracioso vernos después de tantas obscenidades que nos mandabamos, a veces algunas fotos muy indiscretas, pero la charla comenzó amena, muy divertida, con esa chispa de las costeñas y el lubricante social que es el alcohol.

Es una mujer de estatura mediana, de tetas pequeñas, gordita, pero de un culo enorme, unas caderas tan apetitosas, que aun en el bar donde nos vimos, tuve que sacarla a bailar solo para poder tener cerca ya agarrarla, bailamos, bebimos y charlamos y al caer la noche, yo creo que ambos teníamos las mismas intenciones. 

-Yo creo que esta reunión toca cerrarla con broche de oro, ¿no? me dijo mientras se tomaba el último sorbo de cerveza

-Yo no soy el mas conocedor del sector, pero creo que cerca podemos charlar mas en privado..

-Charlar no mi vida, yo quiero pene, dijo sin sonrojarse.

Dicho esto, me levanté sonriente y me fui a pagar, me tomo de la mano y caminamos unas cuantas cuadras, éramos al primero que vimos decente. Un cuarto sencillo y en el ascensor la toqueteadera empezó, primero con un beso profundo, lento, sensual, en ese momento caí en cuanta que aun no nos habíamos besado, y ese primer beso fue lindo, aun cuando íbamos camino al cuarto a culiar. sus manos pasaban por mis brazos y espalda, mientras yo le tocaba el abdomen y las caderas, apretaba ese culo redondo y generoso y la acercaba para que sintiera mi bulto, que ya iba creciendo.

Entramos, dimos un vistazo al cuarto que realmente era sencillo, y se me acercó lenta, acechándome para besarme esta vez con más pasión, mientras me quitaba la camiseta y yo trataba de bajarle el jean, tarea imposible porque ese culo no lo permitía, se rio, se separo de mi y empezó a quitarse el jean mientras yo quedaba solo en boxers, con una erección que me iba a romper la ropa interior. Ella se saboreaba “todo eso es para mi?” decía mientras se quitaba las medias y quedaba solo en brassier de encaje y un hilito descarado, perdido entre sus carnes, generosas y deliciosas, dejando ver un coñito apenas con un bigotico y una figura bastantona.

Me empujo a la camia y se hizo sobre mi, mucho besos en la boca y otro en el pecho, yo con mis manos en sus tetas, apretando y verla gozar, mientras ella rozaba sus chochita contra mi boxer, en realidad iba a estalla, el roce corrio mi boxer y salió una verga cabezona que ella no pudo ignorar, bajo a lamerla, no quiso hacer mucho sexo oral, solo humedecerla para meterla, se veia la arrechera que tenia, así que la agarro y al correr su tanga la metio y empezó a saltar, dios mío que placer!, entraba y salía de una forma deliciosa, muy apretadita y cada vez mas lubricad aporque esta mujer se iba mojando delicioso, mis manos y boca ocupados con sus tetas, que aunque pequeñas era muy excitantes, le arranque el sostén, la tenia mas desnuda, mas bella, mas potra, cabalgandome con toda la gana, con arrechera caribe. sus gemidito me ponían mas duro y aunque yo estaba disfrutando, no podía quedarme si comerme ese culote, así que primero le pedí que se diera vuelta y me cabalgara de espalda, ella entendió y con sonrisa pícara empezó a darme sentones magnífico para apreciar ese culo en su totalidad, clavada en mi verga que estaba más venosa que nunca. La vista 10/10, los gemidos increíbles, así que me reincorpore y la puse en 4, recordando todas las vainas que nos prometíamos por chat, le abrí las nalgas, corri mas el hilo y empecé a comerme ese culote, lengua y saliva para poder dejarla listica. esta chica enloquecida,mordia las sabanas, mientras mi dedo acariciaba su botoncito, ella sabia a que iba, sabia mis intenciones, siempre fui directo con ella, queria clavarle el culo y venirmele ahí, ella me miraba temerosa, peor la arrechera la ganaba, le di unas clavadas en esa chochita chorreante, abri nuevamente las nalgas y la cabeza rojita empezó a intentar entrar, se veía difícil, se notaba el dolor, a incomodidad, pero apenas entre, esta mujer solo pudo gritar “metela toda, hijueputa, comeme” así que hice caso y empecé lento y firme para agarrar ritmo, la tenia apretada de la cintura, entraba con toda la gana posible, mis huevos en sus nalgas sonaban delicioso y como chorreaba la chucha de esta mujer me tenia loco, no voy a mentira tal vez fuero tras minutos de verga constante que la di, casi sin cambiar de posición, solo cadera y pelvis, verga y mas verga para ese culo gigante, no pude más, porque esta mujer si se movía, tenia su toque, y me exprimió literalmente. Aun recuerdo como se sentía mi verga ahí dentro, como su apretón me hizo venirme en una llegada que sentí que me deshidrato. Le llené el culo de leche, lo prometí y lo cumplí, pero esta mujer, al lado mío, sobándome la verga dormida mientras me llenaba de picos quería más.. “ahora siguen mis promesas…”