
Paisaje Invisible
Cada hilo de tu vello es un suspiro, un eco lejano de lo profundo, un recordatorio de que todo lo que existe en ti es un canto silente, un himno a lo que no se puede tocar con palabras.

La plaza de toros
Sudoroso me acerque a ella y me dio un solo beso en los labios y una palmada en la cola “Gracias papito, nos vemos por ahí” … Sali a tomar aire a u especie de balcón, si empeloto y vulnerable, pero deslechado.

El parque
El momento se desenvolvía con una lentitud que solo aumentaba el deseo. La calidez de su cuerpo cerca del mío, el roce de su piel bajo la tela, todo se sentía como un susurro que pedía más sin decirlo. Un simple roce, una car...

Noche II
Imagino mis manos, mis dedos, recorriendo la suavidad de su piel, sintiendo su temblor, sabiendo que cada centímetro de ella es un mapa de secretos compartidos.

Noche
Hay algo en ella, en su piel tan oscura como la noche más cerrada, que me arrastra sin remedio.

LA VIDEOLLAMADA
Entre frase y frase, noté que su voz se hacía más lenta, más baja. También noté que mis ojos ya no se fijaban tanto en su boca cuando hablaba, sino en la forma en que mordía su labio entre palabra y palabra.

Abajo
Las palabras fluían, la cerveza también. Cada roce tuyo era una traviesa caricia que ardía… y no decía amén.

Bajo la mesa
Y entonces, sin más, se inclinó hacia mí, como para contarme un secreto. Me susurró algo al oído, algo que me hizo tragar saliva y sentir un cosquilleo eléctrico entre las piernas:—No sabes las ganas que tenía de volver a ver...

Una noche SW- Parte III
Sin decir una palabra, me empujó suavemente hacia atrás y se arrodilló frente a mí. Me acaricio las piernas con una calma deliciosa, y cuando me tuvo erecto ante ella, puso mi verga en su frente y su boca empezó a explorarme...

Entre juegos y secretos
Entre risas, miradas y pactos discretos, llegaste tú, huésped de nuestros secretos.

Una Noche SW- Parte II
La mujer, entre gemidos, me buscó con la mano y me acarició por encima. Agarró mi verga con fuerza, demostrando un control que me era nuevo. Me tocó firme, segura. Su palma cerrada, caliente, se movía sobre mí pene con una ur...