Tenía una semana libre del trabajo y me dio por coger la moto e irme de paseo para el eje cafetero. Soy de los que salgo solo, muy ligero y sin mucho itenerario, donde me coge la noche ahí duermo. 

Salí de Medellín hacia Manizales después del medio día y la idea era amanecer en Manizales o Pereira. De pintada para arriba me comenzó a molestar la moto, un sonido en la cadena que me hizo parar en varias ocasiones a lubricarla, sin embargo no se organizaba. 

Llegué hasta Pereira ya finalizando la tarde y comenzando la noche y busqué un taller para que me la revisaran. Llegué a uno pero ya estaban cerrando y no me atendieron pero ahí me dieron el dato de uno un par de cuadras más que cerraba más tarde. 

Llegué a este taller y efectivamente estaba abierto pero el ayudante del mecánico ya estaba de salida, sin embargo un pelao, Johany, el dueño del taller me atendió muy amable y me dijo que me ayudaría. El mecánico sucio por su trabajo pero una chimba de man, acuerpadito, barbadito, paisita parecido y lindo con ese overol suelto que se le notaba tenía solo una pantaloneta o boxer por debajo. El mancito estaba tomando pola y estaba animado y encantado con la moto, es una moto grande que a todo mecánico le gusta curiosear. 

Me recibió, me preguntó qué pasaba y me dijo que me ayudaría aunque ya estaba solo y que de pronto me tocaba ayudarle porque su compañero ya había salido. Le dije que no había problema, con tal que me sacara del lío todo estaba bien, es más le ofrecí más pola y que le daba a parte de todo, la liga si me ayudaba. 

Así fue, le traje un sixpac de cerveza y comenzamos la labor. Desmonté allí, mueva aquí, apriete esto, aquello, lo normal. Eso si, la verdad comencé a mirarlo con morbo porque el man aparte de ser un paisita formal y amable, estaba bien lindo y rico, con un cuerpo chimba y ese aire de macho que lo pone a uno medio caliente. 

El man ya estaba tomado y conversando en confianza, me paraba el culo, se bajó un poco la cremallera del overol y se le veía su pecho medio peludo y se rascaba el chimbo, se agarraba las huevas. Y comenzó la preguntadera. ¿Pa’dónde va? Viaja mucho, pq anda solo, y la novia que, que pasa pues que no anda con una chimbita en esa moto? Preguntó cosas de esas que me enfocaron a meterle morbo a la conversación. 

En camaradería le dije: Marica, yo viajo solo, sin pareja guebon, donde me coja la noche ahí me quedo, ando relajado y sin compliques! 

Yo: Y vos que, la polla que? 

Johany: Parce si, con noviecita, ella estudia y vive en un barrio cerca, es una chimba de novia pero no le gustan las motos y muy celosa. Pero ahí voy con ella, de ves en cuando me le vuelo, pero ella no se da cuenta jajaja  

Yo: a guebon como así, entonces come por fuera también? 

Johany: si parce, eso mientras se le pare a uno, hay que meterlo guebon, así sea en roto ajeno jajajaj 

Yo: a eso es verdad, hueco es hueco, no? 

Johany: eso depende del hueco jajaj y me miro con un morbo muy chimba, y agregó, dependiendo del hueco! 

Me le paré al frente y recosté el chimbo sobre el sillín pa que se me viera el bulto y le quedara de frente, ofreciéndome y calentando el ambiente. 

El man se paró y se fue por una cerveza, cuando regresó me dijo que iba a bajar la reja, que si me molestaba, era para que no llegara nadie más que ya no podía atender más clientes para desvararme a mí al menos. 

Yo le dije que de una, mejor para que nadie más llegara. 

Así fue, bajo la reja y quedamos solos en el taller en medio de llaves y motos desbaratadas. Siguió con su trabajo conversando de cosas normales, de motos y vainas, yo lo seguía mirando con morbo. En algún momento y como el taller estaba cerrado, le dio calor y se bajó el overol a la cintura quedando su pecho descubierto y con el resorte de los boxer viéndose desde afuera, cosa que me calentó demasiado y me puso a agarrarme el chimbo seguido. Yo le estorbaba para que pasara junto a mi, me agarraba de la cintura y me rosaba medio medio el chimbo. El ambiente estaba tenso y yo no disimulaba. Me pidió que le ayudara con algo y yo le dije que me quitaría la camiseta para no engrasarla y quedé con una camisilla por debajo, ahí el ambiente se puso más caliente. 

Yo: hey parce que hpta calor hace acá adentro, si o que? 

Johany: si mk hace mucho calor, yo estoy que no me aguanto jaja tome tome pola! Pero relajado que ya estoy terminando. 

Yo: bueno menos mal! Porque ya me estoy es calentando demasiado y me agarre el chimbo descaradamente jajaja 

Johany: mk pero es que una cosa es calor y otra es calentura? Yo por ejemplo estoy es como medio caliente en medio de este overol y la Novia no me atiende hoy. 

Yo: guebon pero no que se le vuela y lo mete por ahí en cualquier hueco mientras se le pare la verga? 

Johany: si, ella no sabe, pero yo soy relajado pa eso! Me cogio de la cintura y me roso el chimbo medio parado ya. 

Yo: Y que hay de cierto que los mecánicos son medio cacorros.

Johany: guebon no se, pero si estas paredes hablaran, mejor dicho. 

Parcero, terminamos ya! Su moto esta lista! Mire haber si quedó bien, que no le toque venir por la garantía. 

Yo: vengo las veces que quiera. Con tal que me atienda como se debe. 

Johany: yo lo entiendo como se debe, se paro en frente mío y se abrió el overol, tenia el chimbo parado Y se le notaba de buen tamaño dentro de los boxer! Yo acá le arreglo la bujía y le doy chispa. 

Yo: Parce, me gustan los mecánicos que son cacorritos, que atienden bien a los clientes y se dejan mamar el pistón, le dije yo y le metí la mano al overol y se agarre el chimbo que estaba ya parado. 

Johany: yo acá los atiendo bien Y si hay que meterles la bujía le doy chispa y los mando bien preñados. Me puso la mano en la cabeza con fuerza y me bajó al frente de su chimbo. 

Se lo saqué y estaba bien lucbricado, una vergs deliciosa, cabezona con olor a sudor de macho. Todo un varón que me puso a mil y me la metí toda a la boca a succionarla y mamarsela. Tenía esos bellos a medio corte, olor a macho, olor a un verdadero hombre fuerte, que hpta chimba, era tanto el morbo que me iba a dejar hacer lo que quisiera de este mecánico maricon. 

Se la mame un buen rato y le agarraba las nalgas y lo manoseaba como si fuera mío, al punto que ya no aguantaba más y me despego del chimbo. Subí y lo bese, besaba torpe pero le gustaba, lo cogi de la cabeza y lo arrodille. Le dije que él también tenía que mamar y probar verga de cliente. 

Me la chupo un rato y se levantó, me apretó fuerte y me dijo al oído: 

Johany: me lo quiero culiar, le quiero dar verga por ese culo. Me tenés que pagar que te desvare a estas horas y eso le va costar una culiada del putas. 

Yo: Parce, cómetelo, es lo menos con lo que te puedo pagar, ese chimbo está delicioso, mételo donde quieras. 

Me voltio contra una mesa y se pegó a darme lengua en el culo el muy hpta, me pego una dilatada del putas y me dedio lo que quiso, jugó con ese culo lo que le dio la gana. Estaba listo pa entrar lo que fuera, el man estaba muy muy arrecho y yo demasiado ganoso. Me pego una puntiada deliciosa con su verga cabezona y luego busco la chuspita y me lo entro con fuerza. Que hpta chimba de verga, la sentí toda con guebas y todo. Me dio como a rata la muy gonorrea esa mientas me decía al oído que le gustaba mucho ese culo y que me iba a demostrar que los mecánicos cacorros culiaban una chimba. Aceleró el ritmo y sentí como se vino a chorros y me lo metió hasta el fondo con una fuerza ni la hpta que me dolió bastante, me hizo ver el putas. Me abrazó por detrás y sentía como se desvanecía su verga dentro de mi. 

Me volteó y me subió a la mesa, se pegó de mi chimbo y me lo mamo con fuerza, como si fuera un bombón, me llevo al límite y me hizo venir dentro de su boca sacándome hasta la última gota! Se levantó y nos besamos con mi semen compartiendo un beso delicioso. 

Fue tan chimba la culiada que el Man me invitó a su apartamento para que siguiéramos en medio de unos tragos y ya con unos rones encima y medio prendo le pegue una culiada de locos también, le di verga por ese culo. Ese hpta mecánico salió más arrecho que un putas, le gustaba de todo y disfruto mero morbo toda esa noche hasta que en la mañana me mando más deslechado que un verraco. 

Le pedí el teléfono y de regreso me varé de nuevo, y terminé en el mismo taller y en el mismo apartamento culiando con este mecánico maricon.