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De esas cosas afortunadas: ella me abordó en Facebook. Me habló recordando que alguna vez me había conocido. Conversa va y viene y me confeso que tenía la fantasía de una aventura con un hombre mayor.
La yerba y el licor son básicos para ella en el sexo. La primera vez fuimos a un motel y después de fumar su bareto y unos rones, se puso de rodillas y me regaló un felación hecha obra de arte.
Seguimos hablando y se fueron propiciando algunas cosas.
Un trío con una marihuanera de su combo. Tener a las dos pegadas de mi verga, una delicia. Alternarse ellas para que las penetrara en cuatro, mientras la otra estaba debajo chupando el gallo y lamiendo de mis bolas.
Muchas noches llegó a mi casa, con sus ojos brillando de la traba, se ponía frente a mi, desnuda, se chupaba sus enormes tetas, se metía los dedos, chupaba mi verga y se ponía en cuatro, su pose favorita, para que le diera fuerte.
Llegaron cuartetos con Yesenia y Ko -que ya contaré-, las comidas desesperadas de ellas, las dobles penetraciones y sus visitas con otras chicas en busca de licor, yerba y sexo.
Dejé de verla algún tiempo y reapareció hace poco. Me contó que estaba de webcam y que como tenía buen registro sus clientes disfrutaban viendo su cara, sus gestos, mientras les hacía el show. Tiene conquistados dos españoles, que le giran su buena mesada y la tienen viviendo a todo taco.
Nos sentamos en nuestra oficina, en sillas giratorias, frente a frente. Comencé a meter mi mano entre sus piernas, Mis dedos jugaban con su clítoris, ella lubricaba en cantidades, y poco a poco le hice un fisting. Tres dedos, luego cuatro, después todos. Acercó su silla, puso sus piernas y fui metiendo mi mano. Era un disfrute ver su cara, como chupaba sus enormes tetas y mi puño entraba totalmente. Me decía que era su primer fisting, gritaba que era mi puta, mi perra, que no paraba.
Sus muslos empezaban a temblar, contraía su cuerpo y agarraba mi muñeca para controlar mi mano dentro.
Se vino con un generoso squirt que inundó el piso. Se repuso un poco, se agachó, me chupó la verga, la puso dura y grande. Nuestras sillas se juntaron y la penetré.
Ahora me llama porque quiere ser tocada de nuevo.
Esta noche nos veremos. Haremos todo eso que ella quiere. Y de regalo me dará su culo.
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